Inevitable Destrucción

Capitulo 17

Belia Moretti

— Murió a los minutos — me informa — Nuevamente fallo

Suspiro ante el informe del científico que trabaja para mí.

— No he podido ir — comunico — Tengo muchas cosas aquí que necesitan mi presencia, pero sigue trabajando en eso porque necesito que eso funcione. Haz que sea un suplicio ¿Entendido? Mientras más rápido es mejor para todos

— Entendido doña

Termino de indicarle los cambios que requiero en lo que está trabajando y cierro la llamada. Después de que mi hermana y Benroy nos sacaran de Noruega tuve que moverme rápido apenas puse un pie en mi territorio para que las cosas sigan su cauce.

Mi celular vuelve a vibrar sin embargo ni me tomo la molestia de revisar por el tono que se reproduce, con esa es la milésima llamada que me hace y aun así no le contesto.

Se supone que debe estar con mi hermana asegurándose que la FIMP no nos cause inconvenientes.

— ¿Belia? — Bianca toca la puerta — ¿Puedo pasar?

Me acerco y abro la puerta de mi habitación para encontrarla con una carpeta totalmente llena de papeles.

— ¿Qué es eso?

— Con Einar estuvimos investigando a la Elite de la FIMP entre ellos está la teniente que reconoció a tu hermana.

— ¿Algo que me sirva para alguna situación fuera de mis manos?

— Su familia por ahora — ubica la carpeta en mi cama — Supuse que querrías revisar tú mismo

Asiento.

— ¿Erika lo sabe? — ella asiente

— Bien, déjame sola

***

Erika Moretti

— ¿Entonces? ¿Ya la secuestraron?

Me volteo enseguida al escuchar esa molesta voz

— ¿Qué haces aquí? — pregunto cruzándome de brazos

— Tu qué crees — se acerca a mí — Vine ayudar a mi hermano

Mi mirada va hacia Seth que está en el celular llamando no se a quién diablos mientras camina de un lado a otro. Estamos en territorio enemigo nuevamente y que en algún momento fue nuestro hogar.

— ¿Que está haciendo? — indaga Benroy mirando a su hermano

— ¿No vez? Jugando bingo — respondo irónica — Llamando no se a quién. A veces haces preguntas estúpidas Benroy

Sonríe y regresa a mirarme

— ¿Te cuento un secreto? — susurra para los dos — Me encanta como mi nombre se siente en tus labios

Sin importarle la presencia de su hermano a metros de nosotros se acerca sigilosamente, nuestras respiraciones se mezclan debido a su acercamiento peligroso y no me alejo, mantengo mi mirada en sus ojos. Me cierra el paso con sus brazos mandándome contra el pilar.

— ¿Que sucede? ¿Nerviosa? — susurra Benroy y noto algo en su voz

Mi corazón late rápidamente por su cercanía peligrosa, mientras lucho por mantener mi postura y reprimir el hormigueo que recorre mi cuerpo.

— ¿De ti? — bufó — Nunca

Benroy río

— Pues pareciera lo contrario — toma un mechón de mi cabello para acomodarlo detrás de mi oreja.