Narrador Omnisciente
Erika caminaba tranquilamente por el centro de Porto Cervo admirando la encantadora Piazza Chiaccchiere. La plaza estaba repleta de bares y restaurantes impresionantes con una vista hacia el puerto deportivo de aquella localidad.
Los turistas bailaban y tomaban fotos de todo lo que veían. A veces Erika se preguntaba como hubiera sido su vida si no fuera una Moretti, no es que reproche su apellido ya que a final de cuentas tiene todo lo que necesita y hasta más...
— ¿Lista?
Indago Dante una vez Erika subió al auto a lo cual ella asintió. Para estarse escondiendo Lorenzo realmente había elegido un pueblo demasiado hermoso, Dante cada vez más se alejaba de todo lo que era el turismo de Porto Cervo para llegar a lo más profundo de unos de los pueblos donde solo eran cabañas y unas cuantas luces iluminando su camino.
— ¿Los numerales y tus hombres?
— Cada uno en sus posiciones.
Erika respiro profundo mientras se mentalizaba que nada debía salir mal en esta noche ya que debían acabar de una vez por todas antes de que se hiciera más fuerte el líder de los Magliana. Dante detuvo el auto donde aparentemente era la última cabaña, ambos podían observar a unos niños jugando en la parte de afuera mientras mantenían la puerta abierta.
Los niños ignoraban a las personas que se bajaban del auto y se adentraban a la oscuridad que había detrás de las cabañas aledañas. Las ramas crujían en cada paso que daban mientras se adentraban aun más.
— No veo nada...
— Debemos seguir caminando
¿Cómo el Capi di Tutti había dado con Lorenzo? Es algo que nadie sabe, solo dio la ubicación y debían llevarlo vivo devuelta a Sicilia. Los numerales estaban desde hace horas a los alrededores de dicho lugar sin hacer movimiento alguno, simplemente vigilaban.
Erika intercambio una mirada en el momento que en el centro de toda esa oscuridad había una mansión iluminada. Ambos asintieron y se fueron acercando despacio sin hacer ningún ruido y sacando sus armas. Dante fue el primero en acercarse a la puerta y de una sola patada la mando abajo pero no contaba que antes de que la puerta llegara al suelo comenzarán a disparar, pero Erika lo jala del brazo escondiéndose enseguida.
— ¡Vamos Dante! — se burla Lorenzo — ¡¿De verdad creías que iba a ser tan fácil?!
Los numerales comenzaron a rodear aquella casa mientras Erika buscaba la forma de entrar sin embargo el que Lorenzo no detenga los disparos no ayudaba demasiado.
— ¡Las balas se te van a terminar Lorenzo! — aseguro el otro hombre — ¡Date por muerto!
— ¡Jamás!
Lorenzo se detuvo y dio vuelta porque en eso tenía razón Dante. Ese fue el momento en que Erika ingreso detrás de Dante siguiendo al líder de los Magliana mientras afuera seguía la pelea entre los hombres de Lorenzo contra los numerales de la mafia italiana.
Erika y Dante se cubrían cada que Lorenzo trataba de darles. Dante estaba concentrado en alcanzar a Lorenzo que no se percato en el momento en el que la pelirroja dejo de seguirle el paso. Erika por su lado no iba a seguir jugando al gato y al ratón, la casa no era gigante y ella podía ver el plan de su enemigo desde que piso esta casa.
Lorenzo sonrió cuando vio que se deshizo de Dante, saco la llave que lo llevaba hacia su salida de aquella casa que había construido su socio.
— ¿Tan rápido te vas?
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Inevitable Destrucción
Science FictionItalia... un país totalmente amplio si de territorio hablamos, pero donde en aquellas tierras existe la disputa de hace varios años atrás. Son cinco mafias, mismo país, comparten fronteras, pero ninguna está dispuesta a estar en último lugar. ¿Qué...