Capitulo 10

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Belia Moretti

— Baja el arma — ordena Dante, pero Seth no lo hace

— ¿Quién demonios te crees para darme órdenes?

— Dante — Finalmente habló — Detente

Me levanto dándole la cara al hombre que no había visto en casi una semana, mantiene el arma en mi frente, y si él aún no la había desactivado, ahora si la desactiva.

— Piensa bien lo que vas hacer Seth — Le habla Nikolay — Porque ella muere y yo no pienso tirar a la mafia italiana por ti.

La confusión en su rostro me hace sonreír y sin importar que pueda soltar un disparo mandándome directo al infierno avanzo un poco más.

— Cierto — sonrió inocente — No estabas enterado que soy la doña de la Mafia Italiana.

Entonces él da un paso atrás pero cuando quiere irse contra mí, Dante interviene empujándolo a Seth se le cae el arma, pero no le importa, se va contra Dante a golpes y es que ambos saben defenderse muy bien, Seth le manda un rodillazo en el estómago a mi socio mandándolo abajo, pero este se recompone barriéndole los pies y también mandando abajo a Seth y es Nikolay quien pone fin a la pelea de ambos cuando los de seguridad quieren intervenir.

— ¡Ya basta! — vocifera — ¡Me importa una mierda sus diferencias, aquí no quiero muertes con las que luego deba tener consecuencias!

Yo veo todo el espectáculo de ellos con una copa de champagne en mi mano que ya se encontraba servida en la mesa. Ambos hombres se levantan, uno tiene el labio partido y el otro un golpe en el ojo el cual tendrá un moretón mañana, entonces la mirada de los tres se dirige hacia mí.

— ¿Terminaron?

— Maldita — Seth se quiere ir otra vez contra mí, pero Nikolay lo detiene — ¡Nikolay me va importar bien poco mandar nuestra alianza a la mierda si no me dejas matar a esa serpiente!

— Pero amore — suelto con burla — ¿Porque el odio? Si mami se encuentra en buen estado

— ¿De qué hablas Belia? — Nikolay suelta a Seth

— Bueno, debo decir que hasta ahora esta es una gran velada — bebo de la copa — Supongamos que secuestre a la madre de los Accardi y ahora el don de la mafia 'Ndrangheta me tiene entre ceja y ceja, pero supongamos — comento con burla — Mucho gusto Seth Accardi, frente a ti, Belia Moretti la doña de la mafia italiana.

Alzó la copa en su dirección bebiendo lo último que quedaba volviendo a tomar asiento como si nada hubiera pasado.

— ¿Comemos?

***

Muevo la cuchara en la taza que tengo para que el azúcar terminé de disolverse, tengo llamadas perdidas de Erika y me recuerdo que debo regresarlas, así que la llamó, una, dos, tres timbradas hasta que contesta.

— ¿Qué pasa? — murmura ella soñolienta y escucho a alguien hablarle

Armani

— Vaya, me voy y suceden muchas cosas — hablo irónica y la escucho como se levanta rápidamente

— ¡¿Dónde demonios has estado?! — exclama furiosa — ¡Papá quiere matarte Belia!

— Nada nuevo — me rio — Te llamo para que avises que voy a regresar y otra cosa...

— ¿Qué pasa?

— Seth Accardi está conmigo — escucho como maldice — Erika... Aquí esta Mike

Inevitable DestrucciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora