Las Siete Voces [+21]

Capítulo 52

Hades

Flashblack

Dos días después de la fiesta de Paula.

Veo a Benjamín solo en la biblioteca y sé que es mi momento, si no aprovecho ahora luego no podré.

Siempre anda con Atenea.

Hades: ¿Dónde carajos está el cobarde de tú hermano?

Se sobresalta al no escucharme llegar.

Benjamín: Joder...

Recoge su teléfono y este se prende mostrando una foto de él y Atenea donde él le está dando un beso en la mejilla y ella sonríe hermosamente.

Este pendejo cree que me engaña.

Hades: Responde.

Alza una ceja pero mirándome fijamente me responde.

Benjamín: No sé dónde está, Hades.

Suelta con burla, maldito.

Hades: Si sabes que nosotros podemos desaparecerte así sin más.

Sonríe arrogante.

Benjamín: Lo hacen y se quedan sin lo más preciado que tienen.

Hades: ¿Crees que nos dejaría?

Sé que quizás si, tanto como sé que no le haré nada, solo necesito saber dónde está el hijo de perra que se hace llamar nuestro amigo casi hermano.

En los ojos de Atenea veo más cosas y sentimientos de los que ella se atreve a admitir o tan siquiera saber que los tiene.

Aveces simplemente decide hacerse la ciega.

Benjamín: Tienen que aprender a compartir, niños ¿Papá no les enseñó?

Se a lo que se refiere como también sé que en algún momento tendremos que ceder.

Hades: No es bueno mentirle a las personas y menos si dices amarlas.

Salgo de la biblioteca con una sonrisa arrogante dejándolo con la clara duda enmarcada en su rostro.

Tengo que estar loco para que el maldito me agrade, el problema es que si estoy loco.

Fin del flashblack

Atenea

Un mes después de salir del coma.

Ha pasado un mes, un mes lleno de roces, un mes llenos de acercamientos tanto decentes como indecentes, un mes donde he estado planificado como acabar con lo que estorba, un mes donde las subidas y bajadas no han faltado.

Un mes lleno de emociones tanto nuevas como viejas pero más intensas.

Un mes de constantes mentiras que se que me generarán un buen castigo en un futuro pero vale la pena.