Las historias que nunca se cuentan

Miércoles 6 de Diciembre del 2023

Hoy ando vestida con una blusa jeans, pantalon jeans, zapatos negros y mi pelo suelto luego del lavado. Solo queria registrar eso.

En el libro de Santos, voy leyendo por la parte donde José, Emma y Oliver se mudan a Fayette a la casa de los Whitmer. En eso, José terminó la traducción de las planchas y se escogieron a los 3 testigos. Uno de ellos fue Martin Harris, quien al parecer no era tan justo y firme. Cuando los 4 se adentraron al bosque para ese evento, no ocurrió nada hasta que él se apartó del grupo. Al rato, José se acercó a Martin. Yo imagino ese momento, Martin con los ojos rojos de tanto llorar, su cuerpo sacudiendose recordando sus debilidades y mirando a José, diciendole que "aún no había recibido un testimonio del Señor, pero que aún deseaba ver las planchas" (Santos, pag 74). Esa última frase fue la que me tocó: aún deseaba ver las planchas. A mi me pasa. Siento un pesar horrible por mis debilidades. Siento que no merezco ni siquiera la misericordia del Altísimo, sin embargo, mi mayor anhelo es poder tener una familia eterna y vivir junto a mi Padre Celestial. Daría lo que fuera por experimentar por lo menos 1 hora de ese dulce momento. Me consuela saber que Martin sí pudo ver las planchas. Yo aún no sé si a mí se me cumpla mi deseo. 

Yo estos días me la he pasado con dolor en los ovarios. Antes sentía mucha molestia cuando ovulaba o cuando se acercaba mi período, pero ahora duele todos los días. Ayer fuí a hacerme los análisis para la tiroides, y hoy iré a llevarlos al doctor. Ya el 20 iré donde la ginecóloga y revisaré esa parte.

Con la uni, ya la semana que viene terminamos las clases. Me ha encantado todo lo que he aprendido este semestre, y aunque no recuerde mucho de eso, al menos puedo practicar y mejorar mis habilidades.

Y nada, esto es todo por ahora. Ah! Chavi llega el día 17. Que emoción!