A Bad Badboy || EN CORRECCIÓN

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Hoy he hecho un examen y toca capítulo para celebrarloooooo

No volví a tener noticias de Kaiden. Durante días solo hubo... silencio. Y preguntas, muchísimas. Las aguanté hasta que no pude contenerlas más y llamé a Lily. Me presenté en la clínica ese mismo día, más tarde.

—¿Por qué miras tanto la puerta?

Desde mi asiento en su habitación, no podía dejar de mirarla. ¿Y si Kaiden aparecia de improviso? Ni siquiera estaba segura de si eso me asustaba o emocionaba.

Quería verlo y alejarlo aún más al mismo tiempo.

Suspiré y decidí ser sincera con Lily.

—¿Sabes si Kaiden va a venir hoy?

—Que yo sepa no. Ha estado un poco desaparecido últimamente.

Entonces, cogí aire y lo solté todo, como quitar una tirita:

—Lo sé todo. Lo del TEI, lo de vuestro padre... todo.

Lily apartó la mirada, como si le diera miedo verme.

—Yo... no... siento no habértelo dicho.

Negué con la cabeza, restándole importancia; eso no era de lo que quería hablar.

—Lo entiendo —admití—. Protegías a tu hermano, por eso quiero hablar contigo.

Esta vez sí me miró. La preocupación había teñido sus ojos. A veces se parecía tanto a Kaiden que... dolía.

—¿Qué ha hecho?

—Ha dejado la medicación. He intentado hacerle entrar en razón, pero no ha funcionado.

Se quedó congelada en su sitio, como si no hubiera entendido nada de lo que le había dicho.

—¿Qué?

—No está tomando la medicación.

—No. Kaiden no dejaría la medicación, él tiene que hacerlo. Está legalmente obligado, ya lo sabes, si no, tendría que ir a la cárcel. Y tú le has dicho que debe tomarla, a ti siempre te hace caso, ¿por qué no iba a hacerlo ahora? Te quiere, a ti te escuchará.

Incluso a mí me dolió tener que negar con la cabeza.

—Creo que... creo que hemos roto. O algo parecido. Discutimos y no he vuelto a hablar con él.

—¿Qué? No, Kaiden... Kaiden te necesita.

—Kaiden necesita superar su miedo, Lily. Cree que tiene que protegerme de Sean.

Parecía tan desesperada por que alguien le dijera que era mentira... ¿Había yo tenido el mismo aspecto mientras me marchaba de su piso? Agarré sus manos temblorosas, intentando transmitirle una confianza que a mí misma me costaba sentir.

—Es idiota... Siempre encuentra una forma de arruinarlo. Le dije que esta vez no me quedaría a verlo. Pero volverá, tiene que... tiene que hacerlo, y estarás ahí cuando vuelva, ¿verdad? Se arrepentirá e irá a pedirte perdón.

—No sé si eso...

—Le pediré a Mike que vaya a hablar con él. Lo ayudó mucho la primera vez.

—Te prometo que haré todo lo que esté en mi mano, Lily. Quiero a Kaiden.

Pasé los siguientes días buscándole. Intentando contactar o hablar con él. pero simplemente había... desaparecido. No me cogió el teléfono, no leyó los mensajes y si estaba en su piso me ignoró cada vez que toqué la puerta.

Sentía que mi corazón se iba haciendo más pequeño cada día que pasaba.