Sobre Hielo [ Larry stylinson]

Capitulo 17 : Una dolorosa pesadilla...

Los rayos del sol que se colaban a través de las delgadas cortinas, no lograron contrastar con su espléndida calidez el gélido aura de aquella habitación. Y tal vez no era la estancia el problema, sino Louis y sus fantasmas mentales que minuto tras minuto lo acorralaban sin piedad.

Sentado en la orilla de la cama; tan solo con un jersey puesto, frotaba su rostro una y otra vez, como si con dicha acción intentara conseguir un poco de claridad a sus encapotadas cavilaciones.
--Maldita sea - le susurraba con frustración a la nada.

Su despertar había sido tranquilo, pero revisar su teléfono lo aventó de un solo golpe a un profundo acantilado lleno de miedo y derrota. Ese artículo deportivo ocasionó una dolorosa descarga eléctrica que lastimó con rudeza su ego.

"Louis Tomlinson , campeón mundial, el subcampeón europeo, el dos veces triunfador del Grand Prix y el actual vencedor del Campeonato de los 4 continentes, se jugará el todo por todo en estos juegos Olímpicos de invierno, ya que esta será la última oportunidad que le brinde el deporte para alcanzar su tan anhelado oro olímpico, ¿serán sus veinticinco años de edad quienes le jugarán en contra? No lo sabemos. Pero la pregunta más importante prevalece: ¿Podrá consagrarse como un verdadero deportista, teniendo consigo al menos una medalla olímpica? Esperemos que sí".

Y despertó de ese sueño; y en su lugar, la realidad le abofeteó la cara como una vieja enemiga. No podía ceder. Amaba el deporte. Amaba los logros. Quería la medalla.

Giró un poco su cabeza para encontrarse con el delicado cuerpo del chico solo siendo cubierto por un pequeño trozo de sábana, sus ojos completamente cerrados y su respiración tan calmada como el caudal de una pequeña quebrada.

Tres punzadas en su pecho lo hicieron quejarse. Le dolía, le dolía romper su ilusionado corazón, era algo tan cruel de pensarse, y aún más de realizarlo. Pero Harry representaba un peligro para su medalla.

-No quiero perder -susurró con los dientes apretados al mismo tiempo que sus dedos se enredaban con fuerza entre sus cabellos castaños -. Papá, ¿qué debo hacer? Ayúdame, por favor.

"¿No crees que ese chico es solo una ave de paso que pronto volará, y con él se llevará la medalla?"

La pregunta de Mark le atormentaba la mente.

"Harry Styles, el tres veces campeón nacional, con tan sólo veinte añitos de edad se perfila como favorito para adueñarse del oro; soterrando así, el protagonismo del competidor local, Louis Tomlinson".

La prensa le dañaba la autoestima.

"Puedo romper tu sueño de ser medallista olímpico".

Y Harry la confianza.

-Maldición. - Sus ojos comenzaron a nublarse producto de la fuerte amalgama de sentimientos encontrados. Sus pensamientos estaban plagados de negatividad, de una necesidad por complacer a sus sueños, mismos que supo mantener vivos a través de los años, porque el dorado olímpico fue lo que siempre soñó y no quería que le fuese arrebatado.

-Lo siento, Harry.- Entonces, la ambición le ganó a esa legión de mariposas que el chico le provocaba. Lastimosamente... su sed insana de ganar triunfó.

Un beso a la altura de su desnudo hombro lo hizo sobresaltarse un poco; sin embargo, se tranquilizó al instante al ser consciente de quien se trataba.

Desafortunadamente, Harry despertó en un mal momento.

-¿Por qué lo sientes? - preguntó con la voz adormilada.

-Nada. Escuchaste mal -dijo nervioso, sin embargo, se repuso de inmediato.

- ¿Qué hora es, Lou -realizó una nueva pregunta, esta vez con su rostro escondido en el cuello contrario.