Sobre Hielo [ Larry stylinson]

Capitulo 45: "Besar el cielo"...

28 de diciembre, clasificación a la final.

Las gélidas temperaturas del gimnasio nunca fueron un impedimento para que la algarabía de los espectadores se viera opacada por estas. Al contrario, la esperanza de ver triunfar a sus patinadores favoritos fue la calidez que les llenó el corazón. Una ilusión que crecía cada vez más, gracias a los deslices artísticos de algún patinador que ponía el alma en su propia rutina.

Las luces varias que parpadeaban en la fría estancia fueron el complemento perfecto para que: España, Estados Unidos, Canadá, Francia, Japón, Inglaterra, Polonia, China, Eslovaquia y Rumanía; demostraran por medio de su diligencia artística, que tan merecedores eran para que esa distinción honorífica a base de oro colgara sobre sus pechos.

El sueño olímpico estaba muy cerca… y solamente cuatro de esos diez chicos, tendrían la oportunidad de alcanzarlo.

***

Sus finos dedos se resbalaban con delicadeza a través de la suavidad que sus rizados cabellos . En cuyos momentos, solo el espejo fue testigo de la inmensa belleza que ese hombre de ojos verdes poseía… Aunque alguien más empezó a notar cuánta hermosura existía en un solo reflejo.

Se observó por unos rápidos segundos, a la vez que sus orbes
detectaban cada trecho de su faz. También, sus manos se dieron a la tarea de palpar de forma ligera toda la longitud de su torso; ese que permanecía preso en una linda camisa chifón color púrpura. Sus verdes esmeraldas nunca dejaron de mirar lo que había frente aquel pulido cristal que reflectaba, por medio de su imagen, la apariencia de una persona sumamente preciosa. Y se enteró… Harry se dio cuenta de lo bonito que era. Su reflejo se lo gritó mediante el encanto de sus ojos; esos que brillaban cual luz en medio de la oscuridad;  Cada cualidad física no pasó inadvertida para el muchacho estadounidense. Y le gustó… le gustó su rostro… le gustó su cuerpo… A Harry Styles le gustó lo que vio reflejado en ese espejo.

Fue entonces que sus acciones manuales se vieron dirigidas hacia la mochila que reposaba encima de la fría baldosa, y de ese modo, sacó de uno de los compartimentos su teléfono celular. Una vez lo tuvo en su mano derecha, comenzó a morderse las uñas de la mano izquierda en un

Intento por mermar esa pequeña ráfaga de nervios que su actual idea le ocasionó. Sin embargo, el impulso de valentía que imperó en su autoestima salió a flote en el instante que su móvil activó la cámara; y la sonrisa en sus labios fue esa chispa que lo atestó aún más en la finura de su presencia.

“Click”

Solo una bastó para darse cuenta lo fotogénico que era. Analizó minuciosamente aquel bonito retrato que se hizo frente al cristal, mientras que en su cabeza; surcó el pensamiento de que su novio también debía admirar la genialidad de su obra de arte. Por lo que, abrió su Instagram y seguido a esa acción; buscó el chat de Louis para poder enviarle tal instantánea.

Se mordió el labio inferior al mismo tiempo que miraba fijamente la pantalla de su celular en la espera de que su amado le respondiese algo que le hiciera sonrojar. Porque Harry amaba la sutileza con la cual Louis lo hacía levitar a causa de sus acertados halagos; mismos que no demoraron en llegar, puesto que las burbujas de mensajería provocaron en Harry, un vuelco en sus desordenados latidos.

"Tú eres todo lo hermoso que existe en el mundo. Gracias por este nuevo fondo de pantalla. Te amo".

Harry no pudo borrar ese emocionado gesto de su boca, el efecto que ese mensaje tuvo en él no dió tregua para lo requerido.

Realmente le encantaba como ese hombre lo hacía experimentar sensaciones muy difíciles de expresar con palabras; pero muy fáciles de hacerlas notar por medio de su lenguaje corporal. Era como si una pieza del más antiguo arte quedara devaluada a comparación suya... Así lo hacía sentir Louis; el hombre que poco a poco sanó su vida en un abrir y cerrar de ojos.