Una canción de Amor

Capítulo 122 | "Mí amor"

Silvia- ¿me golpeaste por ella?
Guido- termina con eso ya o de lo contrario yo...
Silvia- ¿Tu que?
Me acerque a mí padre y estábamos frente a frente. Jorge nos observaba y tomo mí mano, yo me aferre a el.
Guido- No puedes seguir con esto.
Silvia- Yo amo a Jorge, voy a luchar por su amor, no voy a dejar que ella me lo quite. Ella va a llorar, así como yo llore por él.
Guido- Cállate.
Silvia- no me voy a callar. Esa mujer no es ninguna víctima, ella sabía la verdad y me lo ocultó... Y lo hizo porque a ella le convenía quedarse con mí hija y mí prometido. Ella es una mujerzuela y la odio con todas mis fuerzas.
Mi padre me golpeó una vez más, Jorge me jalo hacia el y se acercó a mí padre muy enojado.
Jorge- No vuelva a golpearla porque no respondo.
Guido- tu no te metas y vete... Arregla las cosas con Renata.
Jorge- Yo estoy donde quiero estar, estoy con mi familia.
Guido- dejó de ser tu familia, ahora Silvia está con Carlos y lo ama.
Jorge- váyase señor.
Guido- Terminen con esto de una vez.
Silvia- (llorando) no voy a terminar nada, ella se robo mí vida y ya me toca ser feliz. Vete con ella porque yo no quiero verte nunca más. Te odio. Te odio.
Corro hasta mí habitación, allí lloro y no puedo creer que mí padre me golpeó por defender a Renata aún sabiendo todo lo que sufrí. Me duele todo lo que pasó, son muchas cosas para mí.

Jorge.

Guido fue detrás de Silvia pensé que iría a molestarla pero entro a una habitación. Luego salió con una maleta y se fue enojado. Fui a ver a los niños y Angélica había escuchado todo.
Angélica- ¿Y mamá?
Jorge- en su habitación.
Angélica- papi, no la puedes dejar sola. Ella nos necesita y yo no pienso abandonarla.
Jorge- yo tampoco. No la vamos a abandonar. Ve a jugar mientras hablo con Silv.
Camine lento hasta la habitación de Silvia, no escuchaba nada así que me preocupe y entre sin tocar. Ella estaba de espaldas.
Jorge- Silv.
Silvia- Hola mi amor... Que bueno que llegaste ¿Por qué te fuiste sin despedirte?
Jorge- ¿de que hablas?
Silvia- ¿Y Camille?
Jorge- está jugando con su hermano.
Silvia- que bueno, ¿ya está bien?
Jorge- si. Escúchame.
Tomé sus manos, ella me sonrió y vi sus ojos ausentes, estaba en crisis.
Jorge- perdóname. Por favor perdóname.
Silvia- ¿Por qué?... ¿Vanesa otra vez?
Jorge- No... A ella no la veo más.
Silvia- que bueno porque me cae pésimo, todo el tiempo quiere besarte y tocarte... Tu eres solo mío.
Jorge- mírame Silvia.
Silvia- estás raro. ¿Que pasa?
Jorge- estás en una crisis.
Silvia- ¿De que hablas?
Jorge- ¿Tomaste tus pastillas?
Silvia- ¿Por qué me hablas así? No estoy loca.
Jorge- todo lo que pasó fue mucho estrés. Tu padre te golpeó y eso fue que te hizo colapsar.
Silvia- ¿Que?
Jorge- Ya no somos pareja.
Silvia se enojo y me dio la espalda. Luego volvió a mirarme y estaba llorando.
Silvia- perdón. Perdóname Jorge.
Jorge- ¿Te pasaba eso antes?
Silvia- trate de ocultarlo pero jamás dejo de pasar. Tu siempre estabas conmigo y eso me hacía feliz.
Jorge- ¿Tomaste tus medicamentos?
Silvia- no.
Jorge- ¿dónde están?
Silvia- en el cajón.
Fui por las pastillas y se las di. Ella se las tomo y empezó a llorar más.
Silvia- no es justo todo esto. Ella no es la víctima, ella pensó en su bienestar, ella podría haberme llamado para decirme que mí hija estaba bien y jamás lo hizo. Al igual que tú... Fueron egoístas al alejarme de mí hija y dejar que sufra tanto.
Jorge- pensé que estabas feliz con Bastien y Carlos. Perdón.
Silvia- trate de hacer mí vida normal pero jamás fui feliz.
Jorge- ¿Cómo?
Silvia- fingí estar bien y contenta pero no lo estaba. Me hacía falta mi hija, me hacías falta tu.
Jorge- Creo que estás confundida.
Silvia- claro que no. Yo jamás te deje de amar. Te amo Jorge, te amo muchísimo.
Jorge- veo que no tienes la pulsera.
Silvia- creí que tenía que dejarte ir, pero sufrí mucho al quitarmela. Pero mira.
Ella busco en su cajón y sacón la pulsera y el anillo de compromiso.
Silvia- la llevo conmigo siempre... ¿Y tu?
Saque de mí bolsillo mí pulsera y se la mostré. Ella sonrió.
Jorge- pensé que era mejor hacer mí vida ya que tu estabas con Carlos... Quería agradecerle a Renata el estar con Camille y conmigo.
Silvia- ¿La amas?
Jorge- La verdad... No.
Silvia- Carlos me hizo daño y lo odio. Jamás debí volver con alguien que no amaba. Yo quise amarlo de nuevo y mentí pero no puedo. Yo te amo a ti.
Veo que la puerta se cierra y sé que Camille estaba escuchando todo. Me acerco a Silvia y nos miramos a los ojos.
Silvia- No puedo olvidarte. Te necesito conmigo, no es justo esto... Mi hija no me ama y tu tampoco... Esto no debería ser así.
Silvia llora aún más y lloro junto a ella. Quería que recupere a Carlos porque pensé que lo amaba y que era buena persona, pero se que no. No pudo seguir ocultando que la sigo amando, jamás voy a dejar de amarla. No puedo dejar que nuestros enemigos ganen.
Jorge- Te amo Silvia.
Silvia- ¿Que?
Jorge- Jamás deje de amarte. Te amo más que a mí vida.
Silvia- lo dices por lástima. ¿Verdad?
Jorge- jamás te tuve lástima y menos ahora. Te lo dijo mirándote a los ojos y con una mano en el corazón. Te amo con todas mis fuerzas.
Silvia sufría los espasmos por causa de su llanto y yo solo la abrace. Ella me abrazo y se aferró a mí.
Silvia- No quiero que te vayas. Te necesito a mi lado.
Jorge- Yo también te necesito mí amor.
Silvia- te amo Jorge.
Jorge- te amo Silvia.
Con lágrimas en los ojos ella me sonrió y voltie a ver la puerta. Allí había un papel que alguien paso por debajo de la puerta. Me acerque a agarrarlo y Camille decía que fueron a casa de Ámbar y que regresarían luego. Se lo di a Silvia y ella sonrió al leer.
Silvia- Me dolió que mí papá este de parte de ella. Él sabe cuánto sufrí... Esa mujer es una oportunista, primero me quita a mi hija, luego me quita a ti y ahora a mí papá.
Volvió a llorar y bese su mejilla. Ella me abrazo.
Jorge- Silv... Te amo amor.
Silvia- Yo te amo más.
Me acerque a ella, mire sus labios y ella miró los míos. Corte esa distancia y nos besamos con pasión y mucho amor.
Silvia- prométeme que no nos vamos a separar jamás.
Jorge- te prometo que estaremos juntos siempre.
Silvia- ¿Recuerdas como cerrabamos una promesa?