Una canción de Amor

Capítulo 77 | "desconfianza"

Narra Carlos:

Leila no se sorprendió, la mire confuso, quizás Sol le dijo.

Leila- yo lo sabía, Sol me dijo pero no la había visto hasta que fue a tu departamento.

Carlos- ¿sabías?

Leila- Si, ella al verme allí fue amable, aunque estaba enojada por algo... Me di cuenta que no es una mala persona, es todo lo contrario a lo que dice Sol.

Carlos- yo le hice daño sin saber que era ella.

Leila- a lo mejor si tratamos que Sol la deje en paz te perdona.

Carlos- quizás... Eres increíble.

La comida que pedimos llegó, Elías permanecía en su mundo jugando con algunos dinosaurios. Empecé a comer mirando a Leila, fue de gran ayuda, debo reconocer que sólo la quería utilizar para olvidarme de Silvia pero me di cuenta que no se lo merecía.

Leila- ¿por qué me miras?

Carlos- porque eres linda.

Ella sonrió y acarició mi mano. Seguimos hablando de algunos planes que teníamos para los días siguientes. Pasó el tiempo, Ya nos íbamos cuando Leila y Elías quisieron volver.

Leila- esperanos en el auto, lo llevo al baño y nos vamos.

Carlos- esta bien.

Ellos se fueron mientras yo salía, sin poder evitarlo mire a Silvia, ella estaba de espaldas a mi, Camille me vio, ella reía pero dejó de hacerlo al ver que yo la miraba. Silvia giró para verme y su mirada fue la más fria que jamás me había tocado ver. Giró nuevamente y le hacia mimos a ambas niñas. Salí de allí, me dolia saber que les hacia daño.

Al estar afuera pensaba en si Silvia volvió con Jorge. Supe que ya no se veían como antes, pero ahora, tenían una complicidad, eso ya no debería importarme.

Narra Silvia:

Las niñas estaban inquietas al ver que Carlos nos miraba y estaba de pie a unos metros de nosotras. A quien se le ocurre eso, cualquier persona que este en nuestro lugar se asustaría, bueno, yo no porque lo conozco.

Silvia- tranquila hermosas...  No les hará nada, si se acerca yo las protegeré.

Zaira- pero esta mirando hacia aquí.

Silvia- mi amor ya se va a ir.

Camille- mami... Me incomoda.

Al ver a las niñas inquietas giré y lo miré con frialdad y enojo. Quería decirle que se vaya, se lo dije de alguna forma. Mire a las niñas que me miraban.

Silvia- bonitas tranquilas... ¿Confían en mi?

Las dos- sii.

Agarre sus pequeñas manos y las bese. Luego acaricie su cabello dándoles tranquilidad.

Silvia- guarden sus cosas... Vamos a casa.

Vi a las niñas guardar sus juguetes. Mientras pague la cuenta, nos levantamos y tome la mano de ambas niñas, una al costado derecho y otra al izquierdo.

Caminamos hasta la salida encontrándonos a Leila.

Leila- Silvia... ¿Cómo estas?

Silvia- Hola, bien ¿Tu?

Leila- bien, supe que Carlos y tu.

Silvia- si... Eso fue pasado.

Vi a Víctor que me esperaba y con un gesto lo llame, vino de inmediato.