And so it goes, every weekend, the same party
(Y así sigue, todos los fines de semana, la misma fiesta.)
I never go alone and I don't seem broken-hearted
(Nunca voy solo y no luzco con el corazón roto)
My friends all say they know everything I'm going through
(Todos mis amigos dicen que saben todo lo que estoy pasando)
I drive down different roads but they all lead back to you
(Conduzco por diferentes caminos pero todos conducen de regreso a ti)—The Very First Night (TV) (From The Vault), Taylor Swift
⌘
Retour. [adv. Alemán. De vuelta.]
⌘
[Chat con Gina H.]
[Gina H.]:
Hola Alek!
Hablé con Arizona hace unos días, me dijo que no te ha visto desde la fiesta
Quieres salir este fin de semana?
Si tienes otros planes podemos vernos después
Creo que la pasamos bien aquella vez, no crees?Alek se mordió el labio inferior, leyendo los mensajes que le habían llegado desde la mañana. Recargado en la barra del restaurante donde trabajaba, Alek consideró si contestarle o no a la chica con la que había salido hacía dos semanas.
No era nada del otro mundo. Era compañera de clases de Arizona. Una chica linda según los estándares de la sociedad. Cabello negro (porque Arizona siempre lo emparejaba con chicas de cabello negro), rostro redondo, ojos oscuros de largas pestañas.
Alek creía que la había visto alguna vez en las fiestas de la sororidad a la que pertenecía Anna, pero nunca cruzó palabra con ella.
Un día recibió un mensaje de Arizona para preguntarle si le gustaría salir con Gina.
Y Alek, por ociosidad o desidia, se animó a darle una oportunidad. Además de que no quería terminar escuchando las quejas de Arizona porque de nuevo se había negado a socializar como el ermitaño que era.
Fue una cita bastante normal a su parecer. Fueron a cenar a un restaurante relativamente bueno donde Gina no paró de hablar y Alek fingió que le ponía atención. Estacionaron el auto en una calle con una de las luminarias fundidas. Gina comenzó con un beso que subió de intensidad demasiado rápido, terminando por sentarse sobre él en el asiento del conductor, comiéndole la boca a Alek como si fuera la última fuente de agua en pleno desierto.
El tema del asiento delantero era algo que no le traía buenos recuerdos. Así que con poca delicadeza, Alek tomó a Gina de la cintura y la arrojó hacia el asiento trasero, provocándole una risita tonta; para después pasar por entre los asientos y hacerle compañía.
Alek no opuso resistencia cuando Gina se emocionó por desabrocharle el pantalón, y Gina tampoco se quejó si notó la falta de caricias de parte de Alek cuando empañaron los vidrios y mecieron el auto.
Después, Alek pasó a dejarla al complejo de dormitorios donde Gina vivía, cerca de la universidad, escuchándola lamentarse por la regla del edificio donde no permitían la entrada a personas del sexo masculino a las habitaciones, para tener una segunda ronda en un lugar más cómodo que el asiento trasero del auto. Incluso insinuó la posibilidad de ir al dormitorio de Alek para continuar.
Alek también lo lamentó sin entusiasmo, ignorando la propuesta de su dormitorio antes de estirarse hasta la puerta del copiloto para abrirla. Dedicándole un último beso a Gina antes de que bajara del auto, Alek arrancó sin voltear atrás.
ESTÁS LEYENDO
Ruleta Rusa [Libro #2]
RomanceBilogía «Russkaya ruletka». Libro #2. Alek Ivanov se fue a Tokio esperando regresar para saber qué decisión había tomado Tailime Nazarova respecto a su relación. Pero ella nunca volvió de Moscú, dejando el corazón de Alek destrozado. «Dos por uno» s...