Matrimonio Forzado | Jihan

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—¡Muchas gracias por haber venido a todos! — dije sinceramente a las personas que se encontraban aquí esta noche, en ellas incluido mi amigo Mingyu quien ya estaba al corriente de todo.

La cena fue sorpresa y en mi honor. Sirvieron mis platillos y postres favoritos, estaban mis padres, mi hermano, la familia de Joshua y la mía, no me podía quejar. Una llamada entró a mi teléfono y aparecía como "desconocido", de seguro algún amigo cambió de teléfono y no lo sepa, así que decidí contestar, para esto me aleje un poco de la gente.

—¡Feliz cumpleaños amor! — dijo un alegre Seungcheol del otro lado del teléfono.

—Gracias.

—Espero que te hayan dado muchas cosas, cuento los minutos por verte. Me haces falta, ya han pasado casi tres meses desde que te fuiste.

—¡Jeonghan! Ven, partiremos el pastel — hablo Joshua.

—¿Quién es él Jeonghan? ¿Y por qué vas a celebrar partiendo el pastel?

—Un primo, adiós.

Me di una cachetada mental por lo que acababa de hacer, volví a ocultar la verdad. La oculto para no causarle daño, pero sin embargo, se lo causaré más al decirle que todo este tiempo lo engañe, soy una basura de persona que... ¡Dios, no sé qué hacer ni conmigo mismo!

Pase al salón y ví un pastel de chocolate con el mensaje escrito en chocolate blanco que decía " Felicidades Jeonghan, ya estás viejo" apuesto a que Mingyu dio la idea del mensaje.

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—Padre...

—¿Si, hijo?

Mi padre y yo habíamos salido esta mañana a desayunar juntos, la verdad es que quería hablar con él y aclarar algunas dudas, tengo veinte años y sin embargo siento que todo el poder de una empresa cae en mis hombros.

—¿Cómo lo hacía?... Es decir, ¿Cómo lo haces? ¿Cómo haces para tener tiempo del trabajo y dedicar tiempo a tu casa y a lo que hay en ella, a tu mujer, en tu caso a tus hijos?

—Bueno... — dio un gran suspiro — El trabajo es trabajo y eso se queda en la oficina, no te preocupes por todo, hay gente de buena calidad que te puede ayudar, no dejes a tu familia, por más forzada que sea.

—Gracias... Otra pregunta... — mi padre dio un gran sorbo de su café sin quitar sus ojos de mi — ¿Qué pensaron al comprometerme desde que tenía 1 año?

—Tal vez en ese tiempo incrementar las ganancias al juntarlos... Pero ahora es por su futuro. Nos preocupa lo que sean el día de mañana y solo queremos lo mejor. Yo sé que puedes llevarte muy bien con Joshua y que algún día llegue a gustarte.

—Hemos comenzado a hablarnos más estos últimos días y lo hacemos solo para llevarnos bien.

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Al salir del colegio, si, había vuelto después de unas largas semanas sin clases ya que aprobé todas las materias, en fin. Al llegar a mi casa y darme cuenta de que estaba completamente vacía a excepción de las señoras de limpieza, decidí tomar una ducha e ir a casa de mis padres.

Al llegar entré y pude escuchar unos gritos que posiblemente provenían de la biblioteca, mi mamá reclamaba algo, ya que, sus gritos eran los más fuertes. Me adentré al salón encontrándome con una niña de cómo máximo unos ¿Quince? ¿Catorce? Juro que en mi vida la había visto y era algo raro.

—Hola — salude.

—Hola — dijo en casi un susurro.

—¿Quién eres?

—Soy Eunchae y vine a ver a mi papá, Hong Juwon, ¿Lo conoces?

¿Mi papá? ¿Una hija? Así que por eso los gritos, ¡Dios! Mi papá es un maldito, engaño a mi madre, y a mí, él decía ser feliz con nosotros, nos mintió todo este tiempo, el único fragmento de "mi papá es mi héroe" se ha ido y como me duele.