Matrimonio Forzado | Jihan

⇝21-II ღ

—¿A dónde irás? —me reclamó Alex.

—A un viaje de negocios, ya te lo dije.

—No soy estúpido, sé que Joshua hará su desfile de modas mañana, y es ahí donde seguro irás —me acusó a gritos.

—Piensa lo que quieras, no tengo que darte explicaciones.

—Sí, sí tienes. Soy tu esposo —me mostró su anillo, algo que ya había visto demasiadas veces este mes —Y el otro padre de tu futuro hijo —apuntó a su aún plana panza.

—No metas al niño en esto —cerré mi maleta y salí de la habitación, dejando que gritara y se disgustara solo. Tenía que tomar un avión.

• ────── ✾ ────── •

—Dylan, no lo puedo creer —dije emocionado. —Se han vendido todos los asientos y el evento será en unas horas.

—Tranquilízate, ¿sabes? —miró su reloj de muñeca. —Deberías irte a arreglar.

Le hice caso a Dylan. Ha pasado un mes y él se ha vuelto una persona muy especial; es agradable y muy confiable. He estado muy ocupado dando todo para esta noche, de la que estoy realmente muy orgulloso. Las entradas se vendieron y al parecer todo marcha bien. De Jeonghan, no he sabido nada; nada de lo que los titulares de revistas hayan dicho, como "la mejor boda del año" y cosas por el estilo. A veces no puedo creer lo cobarde que puede llegar a ser. En fin, hasta ahora no he dejado que eso me afecte, y no lo hará; no en este día tan especial para mí.

—Amigo, invité a Mingyu esta noche; no sé si estés de acuerdo.

—Claro, ¿por qué no debería estarlo? Es tu novio.

Mi amigo y Mingyu habían estado teniendo una relación después de aquellos encuentros.

—Bueno, es amigo de Jeonghan y...

—No tiene nada que ver. Jeonghan no me importa; no me afecta.

—Bueno, lo que digas —terminó de agregar el balsamo a sus labios y se miró en el espejo. —Me iré; queremos pasar por un lugar antes del desfile.

—Chao, te veo luego; ya debo irme.

Ambos nos despedimos y tomamos nuestros caminos. Aún tenía que ir por algunas cosas y quizá llegara justo a tiempo para el desfile.

Mi teléfono comenzó a sonar, preocupándome al ver de quién se trataba.

—¿Qué pasó, Mariana? —atendí el teléfono.

—Te necesito urgente; dos modelos acaban de cancelarme.

—Mierda —susurré. —Enseguida voy.

Manejé hasta el lugar y corrí hacia los camerinos. Faltaban dos horas y no tenía a mis modelos completas.

—¿Qué modelos son?

—Las que presentan los últimos vestidos.

—Tú —dije en la primera idea que se me vino a la mente —Tú puedes modelar.

—¿Yo? Pero...

—¿Tu silencio es un sí?

Ella me hizo un gesto con la cabeza para que volteara hacia atrás, así que lo hice; en peor momento no pudo aparecer este cobarde. Caminé furiosamente hacia él.

—¿Qué haces aquí?

—Solo vine a desearte buena suerte y a entregarte personalmente esto.

• ────── ✾ ────── •

—¿Y qué quieres decir con esto? —preguntó Joshua —¿Es un "lamento haberte engañado y prometerte cosas"? O ¿acaso es un "perdón por casarme sin decirte nada ni invitarte"? Apareces como si nada. Saliste en el peor momento; estoy muy estresado...

Había olvidado lo lindo que se ve hablando rápido y preocupado; en estos momentos tengo ganas de besarlo y enseñarle que en mi mundo no hay persona más importante que él.

—¿Estás bien? —reaccioné al ver cómo se mareó; coloqué mi mano en su cadera.

—Sí, estoy bien —quitó mi mano. —Por favor vete; si tenías planes de venir al desfile, ahórratelo.

Se dio la vuelta y comenzó a caminar, pero después de unos pasos perdió equilibrio y lo sostuve al darme cuenta de que se había desmayado. Así que lo primero que se me ocurrió fue llevarlo al hospital. Le grité a la chica con la que estaba que lo traería después de que se reponga. El destino quiere que hable con él, que le explique que lo que siento es verdadero.