(Nota del autor: ¡¡Weeeeeyyyyyy!! El arco se está alargando demasiado. XD Y lo malo, es que no puedo hacerlo más pequeño. Creo que faltan unos 10 capítulos más para terminarlo. Se agradecería mucho si me dejan sus opiniones y comentarios, por favor. Escribo más rápido y les entrego capítulos más pronto cuando me doy cuenta de que dejaron comentarios. Por favor, dejen comentarios, se los agradecería muchísimo. Y si dejan una opinión en general de la novela, ufffff, me ayudarían muchísimo para mejorar la novela. Muchas gracias. Y también, por favor, dejen su like en mi página de Facebook "Ángel Pikas" y sígueme en Twitter @HectorAngelAlv2. Muchas gracias.)
CAPÍTULO 62.5- Ángel y el fantasma de las hadas.
La leyenda del héroe Ángel y sus reencarnaciones.
El héroe destinado a sufrir.
Su verdadero nombre no es Ángel, es Jesús, nombre que le pusieron por Jesús, el hijo de Dios, pero siempre ha odiado ese nombre porque odia a Dios y a la religión en general, y prefirió adoptar el nombre de su vecino, Ángel, y aunque es un nombre religioso, no le importa, pues su vecino era un hombre que Ángel admiraba por ser un gran guitarrista y cantante, algo que a Ángel le encantaba: la música.
La primera vida de Ángel fue una mierda en todo sentido, comenzando por la pobreza extrema que enfrentaba su familia, lo que lo obligó a trabajar desde pequeño para poder comer algo, al menos una vez al día.
Nunca fue a la escuela, pues sus padres no lo enviaron porque no querían "desperdiciar" dinero en eso, así que Ángel se mantuvo ignorante por muchos años y nunca aprendió a leer.
Trabajaba 10 horas al día y regresaba a casa, y después de darle el dinero que reunió en el día a su padre, pues él lo obligaba a dárselo, se iba a la casa de su vecino y él le enseñaba a tocar la guitarra.
Su vecino era un chico problemático en todo sentido, se metía con mujeres con esposos y novios, se peleaba seguido con cualquier persona que le resultara molesto, y desperdiciaba su vida teniendo sexo y drogándose. Pero él era muy amable con el pequeño Ángel, pues él sabía por todo lo que pasaba ese pequeño niño, trabajar bajo el sol por horas y solo ganar lo mínimo, ganancia que su padre se lo gastaba en alcohol y cigarrillos. Él al principio solo sentía lástima por el pequeño Ángel, por eso le permitió observarlo mientras tocaba la guitarra o cuando cantaba con su banda, pero con el paso del tiempo vio en él un pequeño hermano, pues Ángel lo admiraba y soñaba con ser como él, alguien que disfruta de su vida.
—¡También quiero disfrutar de la vida como tú!- Fue lo que dijo Ángel, cuando él le preguntó el por qué lo admiraba.
El pequeño Ángel vivía una vida muy mala en general, llena de carencias, violencia, hambre y cansancio, pero cuando él veía tocar a su vecino, veía en él a alguien feliz, alguien que disfrutaba hacer lo que le gusta. Veía en él a alguien que disfrutaba vivir.
Al conocer sus motivos, el vecino decidió enseñarle todo lo que sabe sobre la música a Ángel, le daba comida y lo invitaba a los eventos en donde su banda tocaba. Le pagaba lo mínimo por ayudarlo en los eventos, pero porque sabía que su padre le quitaría el dinero, pero lo recompensaba con comida y hasta le compró una guitarra.
Ángel finalmente sentía felicidad... Al menos cuando estaba con su vecino.
En casa, veía a sus padres ebrios y hasta drogados, y lo golpeaban por cualquier razón estúpida, simplemente para desquitarse con él por cualquier problema que ellos tuvieran.
Su padre no trabajaba, robaba. Era un ladrón... Y un violador. Un asqueroso criminal que disfrutaba violar a sus víctimas después de robarles.
Y su madre era una prostituta barata, que abría las piernas para conseguir drogas.
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Una comedia romántica con una niña fantasma.
HumorSaik es un chico inexpresivo que puede ver fantasmas. Yuki es una niña fantasma que siempre ha estado sola y nunca ha tenido amigos. Saik sueña con ser el chico perfecto que su madre soñó tener y Yuki quiere tener amigos. Trabajando mutuamente, ambo...