Capítulo 24: Corporación Cápsula y el Recuerdo de Vegeta

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—¡Buenas tardes a todos! Me perdonarán la demora, estaba un poco emocionada por las palabras de Gokú. Sinceramente no me esperaba un discurso tan conmovedor, tenía preparadas algunas palabras para agradecer a mi amigo por estar conmigo acompañándome en esta nueva aventura, pero el se me adelantó y cualquier cosa que diga sin dudas se quedará corto, solo quiero darte las gracias Gokú por haber llegado a mi vida y también a Diana quien ha sido nuestra guía y amiga.

Bulma daría un pequeño pero importante discurso en donde hablaría de sus padres, de su viaje cuando conoció a Gokú y de muchas aventuras vividas, todas obviamente acopladas al mundo que ahora los albergaba.

—Me considero una mujer de hechos, por lo que quiero nuevamente agradecer a todos ustedes por asistir a esta inauguración, una empresa nueva, la cual ha generado altas expectativas las cuales les aseguro no serán defraudadas.

—Es un honor estar aquí hoy para presentarles una innovación revolucionaria que cambiará la forma en que almacenamos y transportamos objetos en nuestro día a día.

—Con ustedes. "Las cápsulas".

Bulma sacaría un pequeño cofre el cual luego de abrir, de su interior extraería una cápsula del tamaño lápiz labial para acto seguido presionar el botón central y lanzarla a su lado en el escenario.

A medida que Bulma arroja la cápsula a su lado con un gesto seguro y decidido, una expectación casi palpable se apodera de la audiencia. Los invitados contemplan con curiosidad y expectación lo que está a punto de suceder, sus ojos fijos en la pequeña cápsula que reposa en el suelo como un misterioso artefacto del futuro.

Un silencio tenso cae sobre la multitud cuando la cápsula, escaneando el lugar con un pequeño as de luz, revelando con una pequeña explosión lo que pareciera un automóvil emergiendo de su interior como si fuera sacado de un cuento de ciencia ficción. La sala estalla en un coro de exclamaciones de asombro y sorpresa, mientras los invitados observan boquiabiertos cómo el vehículo se materializa ante sus ojos incrédulos.

Las expresiones de asombro y admiración se reflejan en los rostros de los presentes, cuyos ojos se agrandan con cada instante que pasa. Murmullos de asombro se elevan entre la multitud, mientras algunos se frotan los ojos como si no pudieran creer lo que están viendo.

Entre la multitud, se pueden escuchar comentarios emocionados y exclamaciones de incredulidad mientras los invitados intentan procesar lo que acaban de presenciar. La presentación del automóvil desde la cápsula de Bulma ha dejado a la audiencia atónita, dejándolos con una sensación de maravilla y asombro ante las posibilidades aparentemente ilimitadas de la tecnología que han presenciado.

No pocos, pensando que se tratase de un engaño hecho con hologramas, suben al escenario para tocar con sus propios manos el vehículo invisible hasta hace unos segundos.

—¡No se preocupen!, lo que ven es real, por favor Sr. Luthor, presione usted mismo el botón que está junto al espejo retrovisor—, le diría Bulma al empresario que había subido al escenario y estaba mas cerca del automóvil.

Luthor obedecería las palabras de Bulma presionando el botón. Luego de un segundo en donde parecería que la cápsula haría un chequeo interno, con una explosión idéntica a la anterior, esta regresaría a su estado previo, siendo levantada por el empresario incrédulo ante lo que tenía en sus manos.

Bulma tranquilizaría a los invitados y los enviaría a sentarse comenzando así su explicación sobre el funcionamiento de las mismas.

—"Me complace presentarles un avance que seguramente transformará la forma en que interactuamos con el mundo que nos rodea". Nuestras cápsulas son mucho más que simples contenedores; son portales a un futuro donde la conveniencia y la eficiencia se encuentran en la palma de su mano.

El Destino del SayayínDonde viven las historias. Descúbrelo ahora