Capítulo 33: Meteoros y Libre Albedrío

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Ya habían pasado unas semanas, Bulma había tenido que dar varias explicaciones a la prensa y al gobierno sobre su relación con Gokú, incluso dudaron de su origen terrestre, por lo que no le quedó otra opción que permitirles hacer exámenes médicos que reafirmaron su humanidad—, por suerte somos idénticos— pensaba la peli azul mientras hablaba con Diana y Bárbara, la amazona también había tenido que dar algunas entrevistas.

La identidad que Bruce les había dado fue realmente importante, tenían coartadas precisas y comprobables, incluso los orígenes de Bulma habían sido cuidadosamente trabajados. Bosnia y Herzegovina y Japón fueron los países de origen elegidos por Bruce, en el caso de Gokú fue mas fácil, vivir en las montañas y ser descubierto por Bulma en su niñez, pera ser educado por ella misma y su familia ficticia, algo fácil considerando el apellido y su manera de pronunciarlo: Son Gokú. Bulma Brief por otro lado era mas complejo, pero la elección del país europeo fue una buena opción, sus ojos azules y rasgos accidentales, sumado una familia sobre protectora de científicos que debido a la mala educación del país y poco orden social y gubernamental le había dado una educación privada con tutores, dando así la coartada perfecta a sus orígenes.

Whiss se ocupaba de dar otras entrevistas suplantando a Bulma en los medios de comunicación, mientras que la peli azul, para evitar que Amanda Waller y el gobierno siguieran molestando, no le quedó otra opción que darle algunos regalos y asistencia tecnológica importante.

La inteligencia artificial de Bruce, tenía acceso fácilmente a cualquier cámara de seguridad o dispositivo de audio en donde quisiera, logrando reducir la taza de delitos de manera significativa al activar alarmas y llamar a la policía incluso antes de que se cometan los delitos. También se había hecho cargo casi en su totalidad de la agenda de Bruce y le ayudaba con su investigación obteniendo pruebas y pistas de una manera que nadie lo esperaría. Oráculo era una IA de temer, no al nivel de Whiss pero muy poderosa al ser asistida también por la IA de Bulma. Aunque seguían habiendo criminales difíciles de atrapar, como era el caso del Joker, quien era impredecible incluso para la IA.

Batman la noche anterior lo había logrado detener, no fue una tarea fácil debido a la locura del payaso, pero finalmente lo había encerrado en Arkham.

La siguiente noche, Bulma y Bruce se encontraron en la mansión Wayne, en una noche tranquila, hablaban sobre las coartadas y el paradero de Gokú, Diana había ido a Themyscira en busca de alguna orientación para encontrar a Gokú, la charla siguió su curso hasta que Bulma decidió tocar un tema más delicado: el Joker.

Bulma cruzó la habitación con una expresión sombría, sus ojos reflejando una determinación que no se veía a menudo en ella—. "Bruce, tenemos que hablar sobre el Joker"—, comenzó, su tono firme y decidido.

Bruce la observó con atención, preparándose para la conversación que sabía que sería difícil—. "Lo sé, Bulma. ¿Qué tienes en mente?"—, respondió, su voz tranquila pero firme.

Bulma se acercó a Bruce, suspirando antes de continuar—. "Bruce, entiendo tu código moral y tu compromiso con la justicia, pero el Joker es diferente. Ha causado demasiado sufrimiento, ha matado y mutilado sin remordimientos. ¿Realmente crees que encerrarlo una y otra vez es suficiente?".

Bruce frunció el ceño, reflexionando sobre las palabras de Bulma—. "Lo entiendo, Bulma, pero si cruzo esa línea, ¿Dónde termina? ¿Cómo puedo justificar matar al Joker y no a otros criminales igual de peligrosos?".

Bulma lo miró con seriedad—. "Porque el Joker no es como los demás criminales, Bruce. Él es un agente del caos puro, un peligro para todos nosotros. Si no lo detenemos de una vez por todas, ¿Quién sabe cuántas más vidas arruinará?".

Bruce suspiró, sabiendo que Bulma tenía razón en muchos aspectos—. "Pero si permito que mis acciones sean dictadas por el miedo y la venganza, ¿no me convierto en lo mismo que él? ¿No pierdo lo que me hace diferente?".

El Destino del SayayínDonde viven las historias. Descúbrelo ahora