-Matty -tararea Louis, sentado en el piso-. Mira -indica, moviendo un muñeco frente al niño.
El pequeño balbucea feliz hacia Louis. Después de tener relaciones en el sofá y caer profundamente dormido, Louis tomó una ducha mientras Harry acomodaba la cocina.
En un momento, Matt comenzó a llorar. Harry le preparó un biberón hasta que recibió una llamada. Ahora, Louis está batallando para que Matt tome su biberón mientras intenta jugar con él para que el llanto no comience nuevamente.
El castaño observa a Harry apoyado contra la mesa de la cocina mientras habla por teléfono, visiblemente tenso.
-No, no, claro que no -murmura Harry con las cejas fruncidas-. ¿Qué?! -gruñe, haciendo que Matt lloriquee ligeramente-. No. ¿Cómo que estás afuera? ¡Joder! -gruñe y apaga su teléfono con un movimiento brusco.
Louis puede sentir la tensión en el aire y pregunta con cuidado: -¿Está todo bien?
Harry suelta un suspiro frustrado y se pasa una mano por el cabello, despeinándolo aún más.
-Mi madre está afuera -dice con una mezcla de incredulidad y enojo en su voz.
Louis se queda en silencio por un momento, tratando de procesar la situación. Matt sigue balbuceando, ajeno a la tensión.
-¿Qué? ¿Y ahora qué se supone que haga? Dios mío, Harry.
Harry niega con la cabeza, sus ojos destellando con enojo. -No, no, está bien -dice para sí mismo, intentando tranquilizarse-. Solo... esto no es un buen momento.
Se dirige hacia la puerta con pasos pesados, claramente molesto. Louis lo observa con preocupación mientras sigue intentando alimentar a Matt, quien parece más inquieto con la tensión en el ambiente.
Cuando Harry abre la puerta, su rostro muestra claramente la frustración acumulada. Al ver a su madre parada allí, la sorpresa se mezcla con su irritación.
-¿Qué haces aquí, mamá? -pregunta Harry con voz tensa, tratando de controlar su enfado.
Su madre, una mujer de mediana edad con el cabello recogido en un moño apretado, lo mira con una mezcla de preocupación y determinación.
-Hola, hijo. Gracias por ser tan amable con tu madre -dice con sarcasmo, su tono revelando una pizca de reproche-. ¡Yo no te crié para que fueras un maleducado! Ahora... ¿dónde está mi bello nieto? -añade, su voz ligeramente aguda denotando ansiedad por ver a su nieto.
Harry suspira visiblemente, se frota las sienes y hace un gesto para que su madre entre.
-Está en el living, pasa -responde Harry, intentando mantener la calma a pesar de la tensión palpable en la habitación.
Su madre entra y observa a Louis y a Matt. Sus ojos se suavizan ligeramente al ver al pequeño, pero vuelve a mirar a Harry con seriedad, esperando una explicación.
-¿Quién es él, cariño? -pregunta Anne, su tono ahora mezclando curiosidad y cierta sorpresa.
-Él es Louis, un compañero del trabajo -responde Harry con una ligera vacilación en su voz.
Anne asiente lentamente, sus ojos fijos en Louis con una mirada escrutadora antes de volver su atención a Harry.
-Entiendo -dice Anne, su tono suavizándose un poco, aunque la preocupación aún es evidente en su expresión-. Bueno, es un placer conocerte, Louis. Soy Anne, la madre de este terco muchacho -añade con una sonrisa forzada que no alcanza a ocultar completamente su preocupación.
Louis se levanta, sintiéndose incómodo bajo la mirada penetrante de Anne, pero intentando mantener la compostura.
-Hola, Anne. Igualmente es un placer conocerla -responde Louis, tratando de sonar lo más tranquilo posible dadas las circunstancias.
ESTÁS LEYENDO
Obsesión Secreta
RomanceLouis Tomlinson, desde una temprana edad, tuvo la fascinación por ver sexo, especialmente el sexo gay. Al principio pensó que era algo normal, ya que se supone que todos pasan por esa etapa debido a las hormonas y demás. Aunque Louis, con ya veintic...