XLIV. Lᴀs ᴄʜɪᴄᴀs

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"I had to have this talk with you" - Jolene (Dolly Parton).

28 de mayo, 1979

La ansiada llegada del verano y todo lo que eso implicaba estaba cada vez más cerca: vacaciones, no más estudios y diversión ilimitada. Sin embargo, el verano venía de la mano del calor, que hacía las últimas clases insoportables. Aquella mañana, en cuanto la lección de Geografía llegó a su fin, Olivia fue la primera en salir del aula. La pelirroja caminaba furiosa por los pasillos del orfanato, hasta que se topó con Giselle, quien también acababa de salir de clase.

-Hey, Olivia, ¿qué tal? -preguntaba la morena, con una sonrisa dibujada en el rostro.

-Hola -contestó su amiga, mirando al suelo, con el ceño fruncido.

-¿Estás bien?

-¡Los chicos son imbéciles!

-Dime algo que no sepa, cielo -suspiró, y agarró las manos de la chica.- ¿Te apetece salir al jardín, y allí me cuentas qué ha pasado?

Olivia asintió con la cabeza, y juntas salieron al jardín, sin pronunciar palabra por el camino.
Al ser un día soleado y caluroso (cosa que no era muy común allí donde vivían), pudieron disfrutar de un agradable paseo entre las flores, y el césped recién cortado.

-¿Y bien? -murmuró Giselle, sin soltar la mano de la pelirroja.

-Lo de siempre: si yo participo en clase, soy una pesada, y una lameculos. Pero si, por ejemplo, participa Agnar, es un líder, un chico culto e inteligente -se cruzó de brazos, llena de impotencia.- No me malinterpretes: Agnar es mi mejor amigo, y le quiero muchísimo, pero, también tiene que darse cuenta cuando algo no es justo.

-Muchas veces la vida es así. Y es una mierda, no te lo niego -suspiró.- A ellos les basta con demostrar que tienen cerebro una única vez para que el mundo entero les aplauda. En cambio, si nosotras participamos, somos unas "impertinentes que quieren llamar la atención". Pero claro, si te quedas callada por miedo a que te juzguen, eres una tonta inútil.

Las dos chicas se sentaron en un banco cercano. La pelirroja jugueteaba con sus manos todavía entrelazadas, mientras que la morena seguía con su discurso.

-Y, no te confundas: yo también aprecio a Agnar, a Rigel, a Ethan y a Jacob, pero, bajo los ojos de la sociedad, ellos siempre van a tener más valor, más coraje y más fuerza que nosotras por el simple hecho de ser hombres. Van a tener más privilegios, inevitablemente. Y, darme cuenta de esto y decirlo no me convierte en una zorra, ni en una pesada. Me convierte en una chica que es consciente de cómo es el mundo en el que vivimos.

-¿Por qué hablas tan bien? -sollozó Olivia, con una sonrisa, lo que hizo que su amiga soltase una carcajada.

-¿Sabes? Tú eres mucho más lista de lo que crees. Mucho más lista que yo, al menos.

-Pero, eres tú la que siempre les calla la boca a todos.

-Y, ¿quién dice que tú no puedas hacerlo? -acarició sutilmente la mano de la chica con el pulgar.- Estoy deseando oír todo lo que escondes bajo esa melena roja.

-Te aburriría.

-Jamás.

Olivia soltó las manos de su amiga para poder envolverla en un cariñoso abrazo, el cual fue correspondido inmediatamente.

-Aunque no lo parezca, a veces yo también tengo miedo.

-Imposible. ¿Miedo a qué?

-En noviembre cumplo los dieciocho años, y, no tengo a donde ir.

★ '79𝚂 𝚖𝚎𝚖𝚘𝚛𝚒𝚎𝚜 ★Donde viven las historias. Descúbrelo ahora