Huellas de un amor || Enzo Fernández

Te ves más linda así.

-todo bien?- pregunto Julián un tanto preocupado, -sisisi, todo bien- le contesté intentando no hablar ya que Enzo estaba ahí.

-no saludas a tu amor?- dijo Enzo acercándose a mi, -para que si te vi hace un rato?- le respondí y se me pasó que se habia referido a el como mi amor, -Entonces si soy tu amor- dijo riendo, -no te emociones tanto Fernandez, que yo no tengo ningun amor- le dije y le palmee el hombro.

-ya comistes Enzo?- dijo Julián, -no, justo te venía a buscar a si comíamos algo antes de ir a entrenar- dijo Enzo, -ah, pero come algo con nosotros, claro si es que a Maia no le molesta- dijo Julián mirándome.

-no, no me molesta, aparte ya está acá y tenemos pizza- le dije y me senté.
-bueno entonces me quedo y después vamos- dijo Enzo mientras se sentaba.
Estuvimos comiendo y después los chicos se pusieron a jugar a la play.

-Maia vos sabés jugar?- pregunto Julián y Enzo se empezó a reír, -¿cuál es el chiste?- le pregunte a Enzo.
-vas a perder Maia- dijo Enzo riéndose.
-no me subestimes Fernández- dije tratando de bajarle un poco el ego.

-hagamos algo ya que estás tan segura de que vas a ganar, si vos ganas me tiro a la piscina con ropa y si yo gano me das tu número de teléfono- dijo Enzo muy seguro de que iba a tener mi número de teléfono.
-acepto- dije sin pensarlo.

-Maia, estás segura?- dijo Julián, -vos también me vas a subestimar?- le dije a Julián, -no, es eso, pero se me hace raro que hayas aceptado- dijo Julián.

-deja Juli, debe ser una excusa para darme su número de teléfono- dijo Enzo riendo.
- wow Enzo, pero es verdad que tenés el ego muy alto, no te emociones tanto que ni siquiera vas a llegar a tener la mitad de mi  numero- dije confiada en que iba a ganar.

Íbamos a elegir que equipo queríamos, así que la forma más fácil de hacerlo era hacer piedra, papel o tijera. Gane entonces tuve que elegir primero.

Estaba buscando un equipo y pude ver cómo Enzo no me sacaba la mirada de encima, -tengo algo en la cara?- le dije para que me dejara de mirar, ya que me ponía un tanto nerviosa. -veo lo linda que te vez cuando estás así de tranquila- dijo sonriendo, la verdad es que la sonrisa de Enzo me ponía tan nerviosa, ya que se vía hemroso cuando sonreía.

Después de buscar tanto entro a argentina en los equipos, obviamente lo elegí. Entonces Enzo empezó a buscar un equipo y optó por elegir a Francia.

La verdad es que el juego estaba bastante divertido, y se podía notar como Enzo y Julián estaban sorprendidos al ver que si jugaba bastante bien, no faltaba mucho oara que termine y con Enzo estábamos empatados.

-vamos Maia- decía Julián, -Julian, de que lado estas- dijo Enzo, -perdon Enzo, pero se merece ganar Maia, no debiste subestimarla- dijo Julián.
Faltaba ya muy poco para terminar, entonces fue cuando, hice un gol y ya iba ganando yo, Enzo parecía ponerse nervioso y evidentemente eso le estaba jugando en contra..

-GANEE- grite cuando había finalizado el partido, - espero que aprendas a no subestimarme Fernández- le dije intentando burlarme de el, -bueno esta bien, pero de una forma o otra voy a tener tu numero de telefono- dijo Enzo riendo.

-bueno Enzo que esperas para tirarte al agua- le dijo Julián burlándose, -busco una toalla y vamos- dije mientras iba al bañó.

Nos dirigimos al patio del hotel y Enzo estaba negado, no quería tirarse a la pileta.
-dale Maia, no me quiero tirar, después tengo que ir en el auto- dijo Enzo haciendo puchero, -te recuerdo que fue tu idea- le dije riendo, -si pero la idea era que pierdas vos- dijo rascándose la nuca.

-enzo te tiras o te empujo- dijo Julián.
-bueno pero dejame que me saque la remera y las zapatillas- dijo Enzo riendo
Una vez se había sacado la remera la verdad es que me quedé embobada viendo a Enzo, parecía tener un cuerpo perfecto, me asombre cuando ví que enzo se a dirigía a mi  -que pasa ¿Te gusta lo que ves?- susurro a mi oído, entonces le puse una mano el el pecho para empujarlo y resultó útil porque fue directo a tirarse al agua.

-esto no va a quedar así- dijo Enzo desde el agua, - son reglas Enzo- le dije burlándome de el, salió del agua, se acerco a mi y sacudió su cabeza salpicandome.
se pegó a mi y me quedé quieta, no entendía que es lo que intentaba hacer.

-la toalla- dijo riendo, le di la toalla y se fue detrás de mi, entonces pude ver qué en cuestión de segundos le hizo una señal a Julián, le tiro la toalla y me levanto en sus hombros.

-Enzo bájame- le grite mientras pataleaba mis pies intentando golpearlo.
-cálmate morocha, no te va a hacer nada en agua- dijo riendo, -noo, no me tires- dije y había saltado, la verdad es que creí que solo me iba a tirar, pero me sorprendí  al ver que el se habia tirado conmigo.

Enzo se empezó a alejar y entonces se me ocurrió la brillante idea de  hacerle creer que no sabía nadar, empeze a hundirme y patalear, fingía querer hablar y a la vez que me ahogaba, -enz- decía mientras volvía a bajar al agua pretendiendo que parecía que me ahogaba.

Entonces Enzo se acercó y me levanto, en el instante que ví la preocupación en sus ojos me arrepentí de haber echo eso, y me arrepentí todavía mas cuando Enzo me tomo por la cintura y me acerco a el.

-enzo soltame- le dije y me separé de el,
-jaja que hdp- dijo Julián mientras se reía, y Enzo me miraba sin entender nada, entonces nos acercamos a la orilla y salimos.

Me puse nerviosa al notar que se me veía toda ya que mi vestido se transparentaba.
-enzo dame la toalla- le dije ya que el la había agarrado para taparse el.
-para que si te ves más linda así- dijo con una mirada coqueta.
-dale Enzo no seas pelotudo- le grite.

Entonces fue cuando paso un grupo de chicos -fua que hermosa- dijeron mientras me silbaban,
-que decís la concha de tu madre- les dijo Enzo y parecía que se iba a acercar a ellos.
Entonces lo tome del brazo para frenarlo.
- me vas a dar la toalla o no?- le dije a Enzo.

Entonces el se acercó y me envolvió usando como excusa para acercarse a mi.
-igual es verdad, te ves hermosa asi- me susurro al oído. Y se excuso para abrazarme.

Cuando mire a lo lejos me puse pálida, empuje a Enzo, pude ver a Fernando acercarse y la verdad es que no parecía nada contento por cómo nos veía, podía ver  cómo tenia el puño cerrado y su mandíbula tensa...