Después de dos horas de intensa operación, la bala fue finalmente extraída del cuerpo de Sebastian. Para alivio de todos, gracias a la pericia del equipo médico y quizás a un poco de suerte divina, no se había dañado ningún órgano vital. Sin embargo, la cantidad de sangre que Sebastian había perdido durante el incidente había complicado las cosas en un momento, pero el personal médico supo exactamente cómo manejar la situación, estabilizando a Sebastian y sacándolo adelante.
Una vez que la cirugía concluyó, Sebastian fue trasladado a una habitación privada para recuperarse. Aún estaba bajo los efectos de la anestesia general, una anestesia total que había sido necesaria debido a la profundidad de la herida y la complejidad de la operación. Su cuerpo descansaba, inmóvil, mientras los monitores a su alrededor emitían suaves pitidos, vigilando cada uno de sus signos vitales.
El enfermero encargado de la situación, Jake, se mantuvo en constante comunicación con el equipo médico y, tan pronto como fue posible, se dirigió a la sala de espera donde Georgeta y el representante de Sebastian aguardaban con tensión evidente. Junto con el doctor que había atendido a Sebastian, Jake les informó sobre el éxito de la operación.
—Sebastian está fuera de peligro inmediato —dijo el doctor, su tono calmado pero profesional—. La bala fue extraída con éxito, y aunque hubo una pérdida considerable de sangre, logramos estabilizarlo. Por ahora, estará en observación durante unos días para asegurarnos de que todo esté bien. Aunque la bala solo rozó parte de un órgano, necesitamos monitorear su recuperación para evitar cualquier complicación.
Georgeta, quien había estado conteniendo la respiración sin darse cuenta, dejó escapar un suspiro de alivio, aunque su preocupación no desapareció por completo. Sabía que este era solo el comienzo de una recuperación que podría tomar tiempo, y más allá del bienestar físico de Sebastian, estaba la delicada cuestión de mantener todo esto en secreto.
El representante de Sebastian, que había estado escuchando atentamente, asintió y, después de que el doctor se retirara, se volvió hacia Georgeta.
—Va a estar bien, Georgeta —le dijo en un tono tranquilizador, colocando una mano firme pero amable en su hombro—. Ahora, necesito hacer algunas llamadas. Se supone que Sebastian tendría algunas grabaciones de entrevistas para promocionar la película que hizo con Chris. Tendremos que reorganizar todo y manejar esto con el mayor cuidado posible.
Georgeta asintió, agradecida por la presencia calmante del representante, aunque su mente seguía dando vueltas a la situación. Sabía que manejar todo esto requeriría una coordinación precisa y mucha discreción. La noticia de la hospitalización de Sebastian no debía salir a la luz, y cualquier cambio en su agenda tendría que ser justificado de manera que no levantara sospechas.
Mientras el representante se alejaba para hacer sus llamadas, Georgeta se permitió un momento para procesar todo lo que había sucedido. La imagen de Sebastian, vulnerable y herido, permanecía en su mente. Sabía que el camino hacia la recuperación sería largo, tanto física como emocionalmente. Pero también sabía que él era fuerte, y que con el apoyo de las personas que lo rodeaban, lograría salir adelante.
Mientras tanto, en la habitación privada, Sebastian seguía descansando, su cuerpo recuperándose de la operación. Los próximos días serían cruciales para su recuperación, y aunque él aún no lo sabía, una red de personas estaba trabajando en silencio para protegerlo, tanto de las complicaciones físicas como de la tormenta mediática que podría desatarse si la noticia se filtraba, mientras que en otro punto de la ciudad una chica con un corazón roto cenaba junto a sus amigos.
Georgeta, tras tomar un momento para recuperar la compostura, decidió que su prioridad sería estar ahí para Sebastian, asegurándose de que tuviera todo lo que necesitaba mientras se recuperaba. Sabía que este no sería un proceso fácil, pero también sabía que estaba dispuesta a hacer todo lo necesario para protegerlo.
Y mientras la vida en el hospital continuaba su curso, Georgeta se dirigió a la habitación de Sebastian, decidida a estar allí cuando él despertara, para ser la primera cara familiar que viera y asegurarse de que supiera que no estaba solo en esto.
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La Búsqueda que nos unió - Sebastian Stan
FanfictionCOMPLETA 🫰🏻 ¿Alguna vez has sentido que las palabras de un libro te hablan directamente al corazón? Sumérgete en la fascinante historia de Sebastian, un actor que lo tenía todo: fama, dinero, éxito y un brillo que muchos envidiarían. Pero detrás...