Capítulo 48: ¿Real?

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Christian dió la última vuelta a la plaza y se dejó caer al suelo cuando sintió que sus piernas ya no respondían. Royer se le acercó y lo miró.

—Te dije treinta vueltas, solo diste veintidós.

—Dame un descanso, joder. —Royer le tiró una toalla y Christian se limpió todo el sudor de la frente.

—Piensa en eso la próxima vez que quieras comerte toda esa comida. No creas que no me di cuenta como ibas a cada rato a la mesa de postres.

—Es solo una vez.

—Vale, pues bajarás todo lo que te comiste de una sola vez. —Christian sonrió—. Levántate. Vamos a caminar para que descanses un rato antes de seguir.

—¿Seguir? Joder, primero me sacas de la cama a las cinco de la mañana. ¿Ahora esto?

—Cállate antes de que te haga dar diez vueltas más.

—Vale, vale. —dijo alzando las manos sonriéndole—. Caminemos.

Las caminatas de Royer no eran técnicamente cortas así que se preparó mentalmente para caminar durante una hora sin parar.

—Te dieron ochenta y tres tarjetas anoche.

—Genial.

—Te haré una pregunta, y quiero que me contestes con toda la sinceridad que puedas. —dijo deteniéndose mirándolo seriamente. Christian asintió—. ¿Que tanto quieres que te explote?

—¿Que?

—Normalmente no pregunto esto y simplemente acepto contratos, pero... Por tu condición no puedo exigirte demasiado, no quiero agobiarte, ni forzarte a hacer cosas que no quieres. Así que... ¿Que tanta cuerda piensas darme?

—No lo sé... ¿Que tan malo eso?

—Si lo dejas todo en mis manos lo más probable es que termines en la cima, Christian. Yo nunca ando con juegos con mi trabajo.

—No lo sé... deberías hablarlo con Lucas. —Royer bajó la mirada.

...

—Ni se te ocurra atormentar a Christian con un montón de cosas, Royer. —dijo Lucas con molestia después de escucharlo—. Tu no vives con él. Si lo explotas arruinaras mi paz. Solo manténlo ligeramente ocupado, ni tanto ni poco. Si le das mucho espacio tomará las cosas muy fáciles, si lo agobias mucho te enterrará lo primero que encuentre cerca en un ojo. —Royer tembló ligeramente ante ese comentario.

—¿Que quieres que haga entonces?

—Presiónalo hasta el punto de que trabaje y se esfuerce, no hasta el punto de que quiera suicidarse. De igual manera me gustaría que hablaras directamente con él. Si está aunque sea un poco comprometido, te responderá. Si ni siquiera le importa, te dirá que hables conmigo.

...

—Vale, hablaré con Lucas más tarde. Da otras cinco vueltas.

—¡¿Que?!

—Diez para que no reclames.

—Mierda. —murmuró.

—¿Quieres que sean quince?

—No, no, vale. Diez.

Vió como Christian se alejaba corriendo. Royer se sentó en una banca y miró sus muñecas. Aún estaban las marcas de las uñas de Christian al sacarlo de su apartamento.

Christian era peligroso, eso era más que evidente. Lucas al parecer era su debilidad, lo dominaba y lo controlaba a su antojo, podía manipularlo una y otra vez con un simple beso, con una simple caricia lo hacía caer a sus pies y utilizarlo a su conveniencia.

Darkness Behind The Glow. TRILOGÍA [DESPUÉS DE TÚ MUERTE].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora