Royer se quitó sus gafas y rascó sus ojos. Faltaban solo dos días para la reinauguración. Estaba cansado. Jamás imaginó que terminaría organizando la apertura de una empresa, y todo lo hacía por Christian, desde su conversación con Jim en el hospital eso había quedado flotando en su mente, quería negarlo pero era evidente que se había encariñado con él y eso internamente le obligaba a quedarse con Christian hasta el final... Aunque cada vez que veía a Christian ese pensamiento de dejarlo se iba de su mente.
Él ciertamente era muy atrayente.
Justo en ese momento Christian lo miró.
Su mirada, sus ojos, su expresión, su vibra, su todo. Simplemente él.
Cuando fue conciente de que estaban mirándose fijamente Royer carraspeó levemente y respiró profundo apartando la mirada de él.
-¿Que pasa? -Royer lo miró.
-Nada, solo me quedé pensando en algo.
-¿Tienes hambre? Podemos ir a comer algo.... O pedir algo... Cómo tú quieras...
De una extraña manera con cada palabra que salía de su boca se sentía aún más atrapado que antes, era como si lo atara, como si lo obligará a darle alguna cosa más que hacer cuando ya estaban cerca de terminar la actual, quería tener la seguridad de que tendrían algo que hacer después, y que nadie fuera a dejarlo. Suspiró y asintió.
-Pediré comida, tu espera aquí.
-Vale. -la sonrisa que le dió fue sumamente contagiosa y Royer se fue la oficina tratando de opacar la propia sonrisa que trataba de acaparar su rostro.
Mientras bajaba en el ascensor hasta la recepción solo podía pensar en Christian, era sin dudas el mejor trabajo de toda su vida, a pesar de que lo había dicho en broma si le habían dado un aumento, y no conforme con eso Christian le había regalado uno de sus autos, que mirando en internet ese mismo auto costaba ochenta mil dólares, y que maldito logo de la empresa contaba veinte mil dólares más, ciertamente jamás se hubiera podido dar el lujo de comprarse un auto, levantó la mirada a la pantalla del ascensor, ni con todo lo que tenía ahorrado antes del trabajo había podido comprarse un auto decente, y ahora con lo que le pagaban... No quería ponerse a pensar mucho. Debía controlarse en la forma en la que gastaba el dinero.
Justo cuando pensó eso, el teléfono que recién había comprado sonó en su bolsillo. ¿Era el universo hablándole? Era un mensaje de Melanie pidiéndole ayuda. Ni siquiera le respondió. Ella era la desesperada que quería abrir la empresa cuanto antes, ahora que ella se encargará de su propio desastre.
Al llegar a recepción simplemente fijó un punto a la lejanía, la puerta de salida, con una mirada de frialdad total pasó entre el ajetreo de la gente y salió de la empresa, y se fue a comprar la comida.
Un auto plateado del otro lado de la calle llamó levemente su atención, creía haberlo visto antes.
...
-Maldición... -susurró Lucas-. ¿Por qué todos tienen memoria visual? ¿No puede haber alguien normal? -apretó el volante entre sus manos. Royer se había quedado mirando en su dirección.
Se odiaba. Era muy valiente con todo hasta que se trataba de Christian, cuando las cosas se trataban de él parecía como si toda su fuerza de consumiera y solo quedará una sombra de lo que alguna vez fue. Un pitido se escuchó dentro del auto cuando el seguro de las puertas se desactivó. La puerta del copiloto se abrió y Lucas saltó en su lugar viendo como Andy entraba.
-Mierda, ¿Quieres matarme? ¡Casi me das un infarto! -Andy rió.
-Lo siento, dejé mi teléfono en casa. Pero ese no es el tema... ¿Que haces aquí? ¿Vienes a ver a Christian? No es por recordarte que llevas aquí casi cuatro horas, enfermo no sé si sería la palabra para describir está situación.
-¿Cómo está Christian?
-"Cómo está Christian sin ti", querrías preguntar. Bastante bien en realidad.
-Esi no fue lo que me dijo Jim...
-En teoría está bien. Solo está un poco cansado por todo el trabajo. Se ha tomado bastante enserio todo lo relacionado con la empresa.
-¿Por qué no le avisaste que había alguien raro en la empresa?
-No actuaba raro. El imbécil estuvo trabajando como cualquier otro en la remodelación.
-¿Viste que lo mató?
-No responderé esa pregunta...
Se quedaron en silencio unos segundos hasta que Lucas volvió a hablar.
-Y Christian... ¿Ha dicho algo sobre mi?
-Si supieras que no me ha preguntado ni una sola vez sobre ti... -le respondió sonriendo, Lucas frunció el seño-. Ni siquiera para preguntarme si estás bien, o siquiera si estabas vivo... Y sabes que sabía dónde estabas...
-Si, tenía un pequeño presentimiento cuando me quedé mirando una cámara y se movió.
-¿Si te diste cuenta? Genial.
-Eres un imbécil Andy...
-Más imbécil eres tú qué estás aquí... -le sonrió-. Como un simple cobarde esperando "el momento oportuno" para ir a verlo.
-¿Podrías callarte?
-¿Que es lo que te asusta? ¿Cómo vaya a reaccionar Christian al verte? ¿Te odiara o llorará apenas te vea? ¿Siquiera le importas todavía? -Lucas apretó su puño con fuerza e intento golpearlo en la cara pero Andy tomó su brazo-. No te preocupes por cosas innecesarias Lucas. Me haces el cine muy entretenido. -un auto se detuvo junto al de Lucas y Andy suspiró-. Me tengo que ir -abrió la puerta del auto-, adiós imbécil.
Andy se cambió de auto y se fue.
...
-Te ves horrible.
-Gracias. -le respondió Jared mientras giraba el volante, iba ala casa de Christian-. ¿Trajiste lo que te pedí?
-Si... -de su bolsillo sacó un pequeño empaque y se lo dió.
-¿Enserio no me vas a pedir dinero por eso? -Jared lo tomó y lo guardó en su bolsillo.
-No me importa el dinero, ni siquiera puedo usarlo, si necesito algo se lo pido a Christian.
-Bien. Ese que estaba en el auto... ¿Era Lucas?
-Si, quien sabe para que vuelve...
-¿No te cae bien? -Andy apretó su mandíbula y volteó a ver por la ventana.
-Es más complicado que eso... Es solo que Lucas es algo desesperante, y más con algo que sea relacionado con Christian.
-Vale... -detuvo el auto frente a la casa y Andy bajó del auto.
Entró en la casa y bajó al sótano.
...
Christian se quedó en la oficina dando vueltas en la silla soltando resoplidos de vez en cuando, el estrés que se concentraba en los primeros pisos era agobiante y justo agradecía que entre el primer piso y su oficina existieran tantos pisos de diferencia.
Recostó la cabeza en el espalda de la silla, ahora podía quedarse más tranquilo durante unos minutos aunque sea... Querer concentrarse en todo era bastante peligroso y ahora que sus pensamientos iban y venían sin avisar...
Se levantó de la silla y bajó a la recepción, se sentó en una silla a revisar su teléfono, prefería el ajetreo que el silencio absoluto.
YohaLR
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Darkness Behind The Glow. TRILOGÍA [DESPUÉS DE TÚ MUERTE].
Mystère / Thriller«-¿Podrías resistir vivir la vida como realmente es, Christian?» Empezar una vida desde cero después de pasar años encerrado en un psiquiátrico sería una tarea complicada. ✨Un pequeño aviso: está es la versión ordenada de la historia de Después de t...