Capítulo 54: ¿Papá...?

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Christian se despertó en la cabaña de Royer, pero.... Recordaba haber vuelto de ese lugar hace ya varios días.

Lejanos recuerdos de no poder escapar de ese lugar lo hicieron temblar. Volvió a concentrarse en el sitio en dónde se encontraba, volviendo a escuchar así los rasguños a los lados de la cama. Realmente no tenía ganas de mirar que era lo que provocaba esos sonidos.

Una fría brisa de invierno entró por la ventana abierta y recorrió todo su cuerpo paralizándolo.

Un pesado suspiró se escuchó detrás de él, había sido diferente, era más grave y más tenebroso. Sintió un peso encima de la cama, justo a su lado. Estuvo a punto de voltear de no haber escuchado a alguien reírse enfrente, para después volver a escuchar los rasguños en la madera. Un fuerte trueno lo hizo voltear a la ventana, viendo una sombra mirándolo fijamente con esos ojos rojos, lograba ver en la oscuridad como le sonreía.

Pesadas gotas de lluvia caían en la fría nieve, comenzando así una fuerte tormenta afuera de la cabaña.

Completamente distraído de todo miró hacia abajo consiguiendo a esa tenebrosa mujer observándolo. Un toque en su hombro lo hizo saltar de cama y caer de manera estrepitosa en el suelo, estando este inundado de un líquido desagradable y baboso. Notó tiempo después como ese líquido comenzaba a subir, cubriéndole del todo las piernas. De lo profundo, salió la mujer cubierta con ese líquido que resultó ser sangre.

-¿Ya estás bien, hijo? -le preguntó con voz dulce. Christian la miró confundido, ella le sonrió cálidamente acariciando su mejilla-. Ya estás bien, hijo. -se lo dijo está vez en tono de afirmación que en lugar de calmarlo, lo puso más nervioso. Ella de repente apartó la mano de su rostro y cambió su tranquila mirada para verlo con una exagerada molestia, tenía el seño fruncido y sus ojos reflejaban enojo y rabia-. ¡No! ¡¡Nunca estarás bien!! -le gritó, Christian se espantó al escucharla-. ¡¡Jamás estarás bien!! -sintió una respiración en su nuca.

-Despierta, Christian.

...

Abrió los ojos espantado consiguiendo una total oscuridad en todo su alrededor. Escuchó un débil sonido provocado por la cortina siendo movida por el viento que entraba por la ventana. Una mano en su brazo lo hizo saltar en su lugar.

-¿Christian? -esa voz...

Era de Lucas... ¿Lucas? ¿Por qué estaba él? ¿Que hacía él en la cabaña? No era posible... ¿Por qué? ¿Debía ser una simple visión? ¿Debía seguir soñando?

Al no obtener respuesta y sentir el brazo de Christian en completa tensión decidió levantarse y encendió la luz cegando a Christian por unos segundos.

Vió como él inspeccionaba el cuarto con sus ojos, nervioso. Eso había pasado muchas en los últimos días, se despertaba en mitad de la noche con esa mirada perdida de no saber en dónde está y al darse cuenta de dónde se encontraba parecía preguntarse como había llegado ahí.

Christian en un momento lo miró con lágrimas en sus ojos, Lucas se acercó a él para calmarlo. Lo abrazó, sintiéndolo temblar, pasó la mano por su espalda arrullandolo.

-Tranquilo, Chris.

-¿Por qué? ¿Por qué me pasa esto? -lloriqueo aferrándose al brazo de Lucas-. No me gusta... No me gusta...

-Lo se. Tranquilo. Se te pasará.

-No me gusta... Lucas... -a su pesar, lo que decía hacia que Lucas se sintiera mal, odiaba verlo así.

Christian había estado más de un mes lejos de él de nuevo, habían pasado un par de días desde que Royer simplemente le había traído a Christian inconsciente. No le dijo nada, no dió explicaciones o alguna justificación de su repentina llegada.

Darkness Behind The Glow. TRILOGÍA [DESPUÉS DE TÚ MUERTE].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora