𝘌𝘯𝘵𝘳𝘦 𝘖𝘭𝘢𝘴 𝘺 𝘊𝘰𝘳𝘢𝘻𝘰𝘯𝘦𝘴 ||
Ava Gibson, una joven sumamente apasionada por el surf y las olas junto su "casi algo", Marlon, que se encuentra sumamente extraño.
Pero eso cambiará, parece que un nuevo surfista roba su corazón.
Cuand...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
ᵖᵒᵛᴬᵛᵃ ⋆⁺₊⋆ 🌙 ⋆⁺₊⋆
El micro avanzaba por la ruta costera, dejando atrás las carpas, la arena y todo lo que había sido esa semana. Afuera, el cielo estaba encapotado, como si incluso el clima supiera que algo había cambiado. Que ya no éramos los mismos.
Yo iba sentada junto a la ventana, con los audífonos puestos, aunque no estaba escuchando música. Solo quería que nadie me hablara. Que creyeran que estaba ocupada, perdida en alguna canción.
Pero en realidad, estaba escuchándome a mí.
Cada tanto, mi reflejo se mezclaba con los árboles que pasaban rápido del otro lado del vidrio. Y no sé... me veía distinta. Como si ya no pudiera fingir tan bien como antes.
Miré hacia atrás, apenas girando la cabeza. Summer iba unas filas más allá, riéndose bajito con alguien. Tal vez con Bodhi. O con Ari. No lo sé. No quería saber.
Baxter estaba más adelante, con Griff. Lo escuché reír una vez. Y aunque no era conmigo, me hizo sonreír un poco. Pero dolía también. Porque esa mañana, antes de la foto, él se acercó... pero no dijo nada de lo que yo necesitaba escuchar.
Y sí... lo besé. Lo hice como si no importara, como si todo estuviera bien, como si no me doliera que no pudiera decirme lo que sentía. Pero lo hice porque todavía lo amo. Aunque no me lo haya dicho.
Suspiré y volví a mirar por la ventana. Shorehaven se acercaba.
Y yo no sabía si estaba lista para volver a la rutina... o para fingir que nada pasó.
Pero tenía que hacerlo. Tenía que ser la Ava que no se rompe. La que sonríe. La que entrena. La que siente todo... y lo calla.
(...)
El sol de la tarde se colaba entre las hojas del patio, pintando sombras suaves sobre la mesa donde estaban mamá, Ari y Wren. El aroma a jazmín y el ruido de los pájaros me recibieron apenas abrí la puerta.
Escuché a Wren hablando, animada, mientras Ari la miraba con una sonrisa tranquila. —Este año quiero hacer algo distinto para mi cumpleaños —decía Wren—. Quizás una fiesta en la playa, con todos...
Mi mamá se rió, con esa alegría que a veces parecía difícil de encontrar. —Bueno, podemos hacer eso —dijo—. Me parece una buena idea. Además, podemos aprovechar para festejar juntos, ya que van a estar todos acá.
Di un paso hacia ellos, tratando de que mi voz sonara normal. —Hola... —saludé, sintiendo que todo el peso que tenía encima no se iba, aunque lo intentara esconder.
Abbie me miró y sonrió con calidez. —Justo estábamos hablando de vos —dijo—. De que necesitás un poco de calma, y también de que Wren quiere festejar su cumpleaños pronto.