Mi Vida Junto A Ti.

Capítulo 1.

P.O.V Ana.

Me quedo embobada viendo la salida por lo que parece mucho tiempo. ¿Nunca les ha pasado que cuando sucede algo sienten que será como un enorme y desastroso cambio en su vida? Bueno, así me siento yo en estos momentos, sé que no será la última vez que lo veré, sé qué me traerá problemas ese chico, sé qué estaré triste por su culpa, pero también sé qué me traerá felicidad, alegría, emociones, y sin duda siento y sé que pondrá todo mi mundo de cabeza, es estúpido pensarlo ya que solo lo vi una vez pero cuando nos miramos sentí que todo se detuvo solo existíamos él y yo.

Toda mi vida me han preguntado si creo en el amor a primera vista y bueno siempre creí que era una estúpidez ¿Por qué creías eso Ana? Simplemente lo creí porque jamás me había pasado y supongo que esto a de ser amor a primera vista.

No sigas con esos pensamientos Ana por favor ¿Qué sabes tú de amor?, sólo sabes de corazones rotos y eso es lo que siempre sabrás. Mis pensamientos son interrumpidos por una mano de una mujer de cabello rubio rojizo, ojos verdes, sonrisa espectacular y se de quien se trata nada más y nada menos que de mi mejor amiga Katherine y por su sonrisa del The Joker me dice que me agarró con las manos en la masa.

-Hola Kate ¿en qué puedo ayudarte?.

-Déjate de rodeos Steele y escupe todo -dice con voz de mandona naturalmente ella.

-No tengo ni idea de que hablas Kate - digo con indiferencia pero a quien engaño es Kate y esta mujer es peor que un detective.

-Sabes qué no me engañaras, ¿Cierto? -preguntó.

-Lo sé, Kate.

-¿Estás lista para decirme?.

-No es el momento, Kate, Tal vez cuando llegue a casa te diré.

-Habláremos más tarde Ana de ésta no te salvas.

El día se pasa demasiado rápido y por loco que suene llegue a pensar que ese chico de la mañana regresaría, pero no fue así. Llegué al apartamento y como de costumbre Kate no está lo cual me alivia muchísimo no quisiera hablar de él porque solo sería ilusionarme y ya estuve ilusionada mucho tiempo, no quiero volver a pasar por eso jamás.

Me preparé de cenar algo sencillo porque no tengo hambre y lo cual me preocupa porque yo me alimento como si fuera un elefante y no engordo. Termino de cenar me pongo mi pijama y ahora si a dormir que mañana tengo que trabajar y no quiero volver a llegar tarde quiero el trabajo y lo necesito... aunque sólo trabajaré  por las vacaciones estos pensamientos me cansan tanto que me que quedo dormida profundamente.

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-ANA -alguien gritaba desde algún lugar lejano a mí- ANA -volvió a decir esa voz tan molesta que no me dejaba dormir- Maldición Ana despierta ya -reconocí la voz y era Kate.

¿Qué diablos quería tan temprano?.

-¿QUÉ QUIERES KATE?- grite del mismo modo que ella.

-Mueve tu pequeño culito y tráeme papel sanitario que no hay -dice con voz muy amable como para ser Kate.

-No, te quedarás en el baño hasta que yo vuelva de trabajar -trate de hacer que mi voz sonará un poco dura pero fracasé, mi risa me delató por completo.

-Ana no me puedes hacer esto, por favor no me hagas esto -dice con voz temblorosa.

Está bien.

Está bien.

Creo que ya la hice sufrir demasiado- Ya voy Kate.

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Me pongo un sostén blanco, un bóxer para mujeres blanco, unos jeans azul marino, una blusa blanca que desgraciadamente se puede transparentar todo lo que no debería pero aún así me gusta usar este tipo de blusas y por último no pueden faltar mis converse negros. Una vez que estoy cambiada, me dirijo al peinador, me hago una coleta y ahora si, estoy lista para el trabajo.

Camino unas cuantas cuadras tranquilamente ya que hoy no se me hizo tarde, así que mi día está comenzando bien muy bien, hasta que de pronto... ¡Mierda! Eso acaba de cambiar completamente ya que un estúpido choco conmigo y me tiro no se que mierda en la blusa ahora si voy a sacar todo el fua interno.

-PERO A TI QUE MIERDAS TE SUCEDE ACASO NO TIENES OJOS Y NO VEZ QUE VOY CAMINANDO JODER CONTIGO ERES UN ESTÚPIDOOOOOOO -grite pero no apartó mi vista de mi blusa empapada.

¡Dios! Estoy echa un asco. Pegajosa y totalmente expuesta a que me miren, a la persona no le importó mucho mi tono de voz  ya que alcanzó a escuchar una pequeña risa y supongo que es de aquella persona molesta.

Levante mi cabeza con total lentitud y al mirar a la persona que tengo en frente me provocó un estado de shock.