Capítulo 33.

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Primero que nada quería decirles que no llegamos a la meta para poder hacer el maratón😢, pero he aquí un nuevo capítulo. Segunda cosa muchísimas gracias a todas aquellas personas que votaron por Maravilloso Desafío | Theodore Grey no crean que no vi su esfuerzo y se los recompensaré con el maratón prometido solo que en estos días no me he sentido bien y no quiero que los capítulos sean malos, cuando me mejore haré el maratón lo prometo✋🏻.
He visto que hay muchas lectoras fantasma👻 anímense chicas a votar si les gustan mis capítulos no pierden nada.

P.O.V Christian.

Aún siento que nada de esto es real.

Que Ana no está aquí conmigo envuelta en un abrazo protector mío.

Que mi mente solo me está jugando una mala broma, pero no, no es así. Esto es real, ella está aquí, estamos de nuevo juntos, ¿Cómo es posible que los problemas mayores se resuelvan tan fácil? Tal vez no es un problema mayor Christian susurra mi subconsciente provocándome un estremecimiento terrible... ¿Habrá problemas mayores? -tragó saliva-.

-¿Christian? -susurra Ana entrecortada mente, no se necesita ser un genio para saber que a estado llorando aparte de que mi traje mojado la delata.

-¿Si... Ana?.

-¿Y qué haremos ahora? -preguntó sin despegarse de nuestro cálido abrazo.

Es una muy buena pregunta, muy buena, realmente no sé qué pasará, ni que haremos, tampoco lo que no haremos no me importa nada de eso en estos momentos solo me importa Ana, siempre me ha importado solo ella.

-No tengo ni puta idea -suspiro pesadamente.

-Yo tampoco lo sé -se separó un poco de mí, lo suficiente para romper el contacto que teníamos hace unos momentos y continuó hablando- pero siento que esto aún no se ha acabado.

Es extraño pero yo también siento eso. Una brillante pero estúpida idea se me atravesó por la mente, ¡Joder es magnífica!- Creo que le debemos dar un pequeño empujón al karma ¿No lo crees? -dije con sorna, mirándola directamente a los ojos enseguida ella supo qué tramaba algo, bendita sea nuestra compresión sin expresión.

-¿Qué tienes en mente? -sonrío de lado, ¡Dios! Amo a esta chica.

-Algo que te gustará demasiado -le confesé.

-¿Más que tú? -se sonrojó.

-Creo que eso no es posible -bromeé y ella me golpeó el hombro.

Le di un beso en la frente- ¿Volvemos? -preguntó.

-¡Uh Ana! Eso te lo debería haber dicho yo pero ya que insistes -sonreí.

-Serás idiota, me refiero a que si volvemos a las mesas -aclaró sonriente.

-Es mejor seguir separados para que mi plan funcione ¿de acuerdo? -sonreí forzadamente.

-De acuerdo, te amo -me dio un beso en la mejilla derecha y se fue.

-También te amo Ana -susurre a la nada. Ya quiero que todo esto se termine.

Fe y paciencia Christian.

Fe y paciencia.

Mi Vida Junto A Ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora