Capítulo 18.

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P.O.V Christian.

¿Qué mierdas a pasado? ¿Todo a terminado? ¿Se acabó? Ana no me a dejado explicarle a lo que me refería y a confundido todo, estoy parado en medio de la calle completamente confundido ¿Qué coño le a pasado a Ana? Su jodida confusión está arruinando una de las cosas más bonitas por así decirlo que he tenido en mi vida y no por su mierda voy a dejar que todo eso se arruine, corro de nuevo al hotel en busca de mi auto, una vez llegando ahí me dirijo a su casa lo más rápido posible que puedo.

Llego a su casa pero antes de que llegue tan siquiera a tocar la puerta sale Adam su hermano y detrás de él está Ana sus ojos llenos de lágrimas y ¿qué le ha pasado? tiene sus dos manos vendadas, a echo otra puta locura.
Adam al momento de verme se acerca a mí con paso decidido sé perfectamente lo que quiere hacer, me lanza un puñetazo que esquivo fácilmente, por favor, no vengas a enseñarme los golpees que sorprenden al Dios de la pelea.

-Adam déjalo -dice Ana si ni siquiera mirarme, Joder esta chica sí que está loca no he echo nada malo o por lo menos no a ella, pero había alguien más loco que ella y era yo, toda ella es una mierda que yo amo con locura.

-Tenemos que hablar Ana -le digo.

-Tú no hablaras con ella jamás -Adam suena muy molesto tal vez no sean hermanos de sangre pero joder ambos eran igual de testarudos.

-Me importa una mierda lo que tú pienses yo vine aquí para aclarar las cosas con ella -le señaló a Ana- no contigo así que no te metas.

Mi comentario no le agradó mucho puesto que se a lanzado contra mí me intenta dar un puñetazo esta vez si lo consiguió tenía meses de no sentirme así lleno de impotencia y rabia, no haré nada al respecto no quiero que las cosas se salgan aún más de control, me vuelve a dar otro puñetazo que va directamente a mí boca me hace caer al suelo contente Christian no hagas nada, justo cuando Adam me iba a dar otro golpe la pequeña mano de Ana detuvo el brazo de él en pleno trayecto pero no duró mucho tiempo ya que ella se quejaba de sus manos.

-Suficiente Adam, déjalo -Ana voltea a verme su mirada ya no tiene ese brillo que solía tener ahora es triste y con miedo.

-¿Lo defenderás Annie? -le pregunta Adam a Ana.

-No lo defiendo Adam, solo no quiero problemas.

-¿Podemos hablar? -le digo a Ana.

-Tienes que curarte ese labio te sale mucha sangre -aún se preocupa por mí, genial no lo he perdido todo- Ven te curaré, o tal vez te empeore la herida -sonrío.

Entramos a su habitación donde está Kate recogiendo un desastre que hay en el cuarto de Ana vidrios por todos lados, nuestras fotos echas mil pedazos, sospecho lo que pasó, Ella al vernos frunce el ceño pero después sale de la habitación.

-¿Qué te a pasado en las manos? -le preguntó, en lo que ella se acerca a mí con el botiquín.

-Un pequeño accidente -dice sin mirarme.

-Ana -le reprochó.

-Esto ya no es asunto tuyo Christian.

-¿Christian? ¿Ya no soy tu amor? Y aún sigue siendo asunto mío, todo lo que te pase es asunto mío.

-Sí vas a reprocharme será mejor que te vayas -sigue sin mirarme y su voz suena triste.

-¿Qué nos pasó Ana? Todo iba bien hasta que bueno no sé realmente que hice para que te fueras así.

-Tu me dejaste Christian ¿no lo recuerdas?, solo querías tener sexo conmigo y después me dejaste, igual que él -¿Qué yo que? Yo no hice nada de eso, por el amor de Dios yo la amo más que a nadie.

Mi Vida Junto A Ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora