Capítulo 23.

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P.O.V Christian.

Que puta locura no recuerdo muy bien lo que pasó anoche, siento que mi cabeza va a explotar, maldición de seguro he bebido demasiado, apuesto a que debío ser una estúpida apuesta que hice con Thomas como en los viejos tiempos... Se escucha un terrible sonido tan molesto que ya quiero que paré ¿Qué mierdas es? Tal vez tu celular idiota, si eso es.

5 Llamadas perdidas de Ana, Joder Ana me olvide que hoy saldría con ella, que buen novio eres Grey. Vuelve a sonar mi teléfono y esta vez sí contesto.

-Lo siento Ana me quede dormido -Espero que no esté enojada.

-Soy Ashley, idiota -¿Qué mierdas?.

-¿Qué quieres?.

-Me dijiste que hoy saldríamos a tomar algo ¿No recuerdas? -¿Qué yo hice que?.

-Claro que no estás loca.

-¿No recuerdas lo que pasó anoche? -su tono de voz fue algo ¿Sensual?.

-No pasó nada ayer -estoy seguro de eso.

-Repítetelo hasta que te lo creas, solo espero que cuando Ana se enteré no esté tan molesta como para querer arrancarte el pene.

-¿Qué hice? -ya no estoy tan seguro.

-Tienes que saberlo por tu cuenta o bien podrías preguntarle a tu amigo, adiós Christian.

-Espera, no... -me a colgado, genial tendré que hablar con Thomas de lo que pasó pero seguirá dormido que es lo más seguro.

Dejo el celular a un lado y me froto la cara con ambas manos, ¿Qué has hecho Christian? No creo que haya sido nada malo, espero que haya sido unas de mis tantas estúpideces solamente, mis pensamientos son interrumpidos por unas voces seguidos de unos pasos, segundos después la puerta de mi habitación se abre y ahí está ella tan hermosa como siempre cierra la puerta y después viene hacia dónde estoy, se sube a horcajadas de mí.

-Buenas tardes mi amor -me besa- Sabes a cerveza -dice sobre mis labios.

-Si, bueno, creo que me he pasado de mi límite -le doy una sonrisa fingida.

-¿Te la pasaste bien? -eso quisiera saber.

-Sí, bien, pero estoy mejor ahora -la beso.

Ana suelta un pequeño gemido una vez que siente mi erección -¡Christian! -me reprocha.

-¿Un rapidín? -levanto mi ceja derecha.

En respuesta Ana me besa con fuerza pidiendo más pero antes de poder quitarle el diminuto short que trae puesto ella me sostiene las manos a ambos lados de mi cabeza sus labios ahora han tomado camino de mi cuello a mi oreja siento su aliento caliente ya no puedo más el bulto en mi bóxer es incómodo.

-Hoy no -me besa la mejilla y se baja de mi.

¿Qué? Solo me ha puesto caliente y ¿No habrá acción hoy? -¿Porqué?.

-Ando en mis días -Creí que a las mujeres les daba pena decirlo pero veo que a Ana no.

-¿Y eso que? Un buen pirata no le teme al Mar Rojo -le beso el cuello.

-¡Christian! -me vuelve a reñir pero después se ríe- Mejor date una ducha helada porque la necesitarás -señala mi bóxer- y vámonos.

-Esto es lo que ocasiona con sus actos tan sexys -le señaló mi bóxer provocando que ella ría- pero tiene razón Señorita Steele la necesitaré -le beso el cabello y me dirijo a la ducha.

Mi Vida Junto A Ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora