Capítulo 4.

6.8K 429 16
                                    

P.O.V Ana.

Lo más extraño de todo es que él no me rechazó, sólo me siguió la corriente, me recompongo al instante de darme cuenta de lo que está sucediendo.

Me sonrojo y él sólo me sonríe.

Esto es jodidamente bochornoso.

***************

-Oh vamos Christian, no es para tanto -río.

-Por favor Ana podrías quitarla no puedo más es realmente asqueroso -rápidamente cierra la boca y al instante se le inflan los cachetes, corre al baño.

Apenas me iba a levantar para ver como seguía la niña de Christian pero se abre la puerta de la entrada y entran mis mejores amigas riendo como ya es de costumbre.

-¡Hola Ana! -dicen las cuatro al mismo tiempo.

-Hola chicas -respondo con una sonrisa.

Las cuatro abren tanto la boca que hasta da miedo al momento en que se quedan viendo a un punto fijo volteo a donde ellas miran encantadas y me encuentro a Christian con cara de pena y dice:

-Buenas noches chicas.

Kate, Jazmín, Alice y Leila no pueden articular ni una sola palabra así que decido que es momento de presentarlos.

-Chicas él es Christian, Christian ellas son Kate, Jazmín, Alice y Leila -cada una levanta la mano como en forma de saludo al escuchar su respectivo nombre.

Leila camina hasta donde él se encuentra Ya va a venir con su putería barata pensé le da un beso en cada mejilla y éste sólo se limita a quedarse muy quieto -Un placer conocerte.

-Igualmente Sheila -responde.

-Es Leila -le corrijo como puedo ya que estoy tratando de ocultar mi risa.

-Perdón Leila, bueno chicas creo que ya es momento de retirarme y no quitarles su tiempo.

-Te acompaño a la puerta -le digo.

Caminamos lentamente en un silencio muy cómodo a mi parecer hasta la puerta de mi casa, una vez allí Christian decide romper ese silencio.

-Gracias por ésta noche Ana, aunque lamentó demasiado no poder habernos conocido muy bien ya que nunca quisiste hablar por ver la película -ríe-pero espero poder salir otro día y ahora sí poder conocernos más.

-De verdad lo siento mucho, es que cuando veo ese tipo de películas me quedo muy embobada como ya te diste cuenta -reímos- pásame tu número y así podríamos quedar algún día.

Intercambiamos números y pareciera que no se quiere despedir de mi ya que se me ha quedado viendo, le paso la mano por la cara y así a duras penas y reacciono.

-Mmm... Bueno yo... Creo que ya es hora de irme, aunque no quisiera hacerlo -esto último lo ha dicho demasiado bajó para que no lo escuchará, pero aún así lo hice.

-Te cuidas y no vayas a vomitar encima de alguien -río y el me fulmina con la mirada.

-Que graciosa eres, nos vemos otro día -saca su teléfono, envía un texto y al minuto aparece un carro enfrente de mi casa, me da un beso en la mejilla -Adiós -camina hasta el carro de hace un momento y se pierde de mi vista.

Entro a la casa y como era de esperarse mis queridas amigas me hacen preguntas de todo tipo, excepto Leila ella está muy callada con la mirada perdida.

-Oigan, ya, suficiente estoy muy cansada y mañana tengo que ir al trabajo muy temprano -me excuso para que no sigan con su interrogatorio.

-¿Te ha dado muy duro, no es así Ana? -me pregunta Kate.

-Sí quieres yo te puedo dar un poco de mi pomada -dice Jazmín.

-Vamos que yo te unto esa pomada -continuó Alice.

Las tres rompen a carcajadas al ver mi cara roja.
Todas nos quedamos viendo a Leila ya que no ha hablado y sigue en las nubes.

-¿Hey a ti te comieron la lengua? -le pregunta Kate y Leila sólo la ignora.

-Parar ya... Y para su información ha sido muy cuidadoso en su momento -río ante sus caras llenas de sorpresa y corro a mi habitación ya que se que no se querrán quedar con la duda.

Mi Vida Junto A Ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora