Narra Ash
Llegamos a la habitacion de Alexey, llamamos a la puerta y nos recibió con una calida sonrisa.
-Buenos dias Reina Irina, doctora Astrid. -dijo el joven al vernos. -¿Quien os acompaña? -se puso de puntitas y miró tras nosotras.
-Unas amigas nuestras, nos las hemos encontrado de camino y las hemos invitado. -comentó Irina. - Espero que no te moleste.
-¡Para nada, cuantos más mejor! ¡Pasad! -se hizo a un lado y entramos.
Me puse a observar la habitación, era bastante madura para ser de un chico de 13 años; estaba pintada de color azul, todos los muebles eran blancos; el escritorio, las estanterías, la cama... Había una televisión conectada a una máquina de videojuegos y un reproductor de CDs, perfecto por si queríamos ver alguna película.
-¡PERO QUE COSA MAS MONA! -un grito me alarmó.
Repentinamente, vi a Catarina abrazando y ahogando a Alexey entre sus voluptuosos pechos.
-Cata... Lo vas a matar. -dijo Elisabeth entre risas.
-¡Pero es tan mono! ¡Me lo comía a besos! -lo achuchó aún mas fuerte.
Una rebelde Irina salvó a Alexey de morir ahogado, en cuanto lo sacó dió una gran bocanada de aire, como si hubiese estado sumergido en pleno mar.
-Se mira, pero no se toca. -dijo Irina rodeando el cuello del muchacho con sus brazos.
-Pareces una madre coraje, Irina. -rió Elisabeth.
Irina hinchó los mofletes y se abrazó aún mas fuerte a Alexey.
-¡Si yo soy la madre entonces Ash es el padre! -gritó. -¡Y vosotras las tías! -dijo señalandolas.
-¡Entonces deja algo de sobrino a la tia pelirroja! -Catarina encaró a Irina, y esta no dudó en responder.
Alexey parecía pensar: "Alguien, ayuda." Lo agarré del brazo y lo senté a mi lado en la cama, poniéndolo a salvo.
-Bueno Alexey, mientras las dos locas se pelean ¿porque no jugamos a algun videojuego? -me levanté y encendí la televisión y la consola.
-¡SI! -gritó entusiasmado.
-Yo me apunto. -dijo Elisabeth sentandose al lado del muchacho.
Irina y Catarina me miraron furiosas, sus ojos parecian sacar chispas, yo solo me limité a sacarles la lengua y empezar a jugar al juego de lucha que Alexey eligió.
Irina se sentó a mi lado y Cataria al lado de Elisabeth, tras un rato en silencio y viendo como nos divertiamos los tres, ellas también se unieron.
Para mi sorpresa, Irina era realmente buena en los videojuegos, tan buena era que acabamos todos perdiendo ante ella.
-¡Estas haciendo trampa! -la acusó Catarina.
-¡No! ¡Es solo suerte! -se excusó Irina.
-¡Pero es imposible que tengas tanta suerte! -se levantó.
-¡Y como quieres que haga trampa si nunca he jugado con esta cosa! ¡No se como se hace trampa! -Irina también se levantó y encaró a Catarina, de nuevo.
Parecía que iban a matarse la una a la otra en cualquier momento, pero un pequeño sollozo las detuvo, Alexey tenía la cabeza gacha y estaba llorando
-¿Que te pasa, Alexey? -pasé mi mano por su espalda, para tranquilizarle.
-¿Te han asustado estas dos? -Elisabeth se agachó frente a el, para poder verle la cara.
-No, no es eso. Es solo que... -hizo una pausa. -Hacía mucho tiempo que no me sentia tan feliz.
Levantó la cabeza y nos mostró una sonrisa pura, calida e inocente, me entraron ganas de llorar con aquellas palabras, así que no pude reprimir una lágrima o dos.
Pero no fui la única, todas estabamos llorando excepto Irina, que miraba al niño con tristeza.
-¡Prohibido llorar! -Irina se lanzó sobre el muchacho y comenzó a hacerle cosquillas.
-¡Basta! -decía entre risas. -¡Reina Irina!
-¡Prometeme que no llorarás nunca más! -dijo Irina.
-¡Lo prometo! ¡Lo prometo! -todas reímos ante esa escena.
-Bien. -se detuvo. -¿Alguien tiene hambre?
Levantamos la mano todos, miré el reloj y marcaba la una menos diez minutos, salimos de la habitación y fuimos hasta el comedor, Alexey y Catarina compartían los mismos gustos por la carne, Elisabeth y yo nos comimos una ensalada cada una e Irina como siempre, tres manzanas.
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Hibridos
Fantasy♡[Historia con contenido Girl×Girl]♡ ♡Si no es de tu agrado; no lo leas. ♡ El amor lo puede todo, y esto es lo que tendrán que demostrar Irina y Astrid, una mujer pantera y una científica recién licenciada. ¿Las acompañarás en su aventura?