Muy VIEJA para tanto DRAMA

Cap. 60

"¿Cómo dices?", se escucho la voz fuera de si de mi ex marido, al oírlas en la grabación, ambas sonreímos en complicidad.

"Lo siento", aclaro mi psicólogo. "He hecho todo lo posible y nada ha resultado, temo que la paciente se enamoro de su amigo. Hikari, creo que es su nombre.

"Pero... pero... no... ¡No! ¡No puede ser!"

"Le digo que es posible... ella ha resuelto su conflicto con usted, incluso, lo ha perdonado, ya no siente nada por usted. Es normal que un paciente al encontrar un buen modelo de persona que le provea lo que su anterior amor no le supo dar, entienda lo que era bueno en su vida y lo que no."

"¿Me esta diciendo "MALO"?"

"No, no, no... claro que no... es solo que ella ya no tiene sentimientos rencorosos, podría cruzarse con usted y sonreírle genuinamente, deseándole el bien y la misma felicidad que reine en su vida.", unos segundos de silencio. Casi podia ver la cara de Sergio contraerse.

¿Qué se siente que quieras volver y tu viejo amor ya no este?, eso, me dije a mi misma.

Claro, la chica nueva era linda y agradable, pero descubrio que no planchaba, que no limpiaba, que no cocinaba, que no oia. Solo era un adorno, y conocía tres palabras a la perfeccion como si las hubiese aprendido desde su nacimiento: TARJETA DE CREDITO.

Cher habia hecho trabajo de investigación. Su hermano, al hablar con sus amigos lo contaba. Incluso a su padre. Renegaba de su decisión, de dejarme partir, y claro el secreto que solo yo conocía.

...

Conmigo al frente, Hikari atendió la llamada de Sergio, hice una seña y lo paso al alta voz:

-¿Hola?

-¡¿Qué es eso de que te acuestas con mi mujer?! ¡¿eh?! ¡Eso no era parte del trato, maldito chino!

-Ex mujer...-Le recalco con molestia. Lo note.-Disculpa, Sergio... pero tu dijiste que ella debía olvidarte a como de lugar.-Asenti con una sonrisa, mientras a Hikari se le arrugaba el ceño.

-¡Idiota! ¡No me refería a ti! ¡sino a los sujetos que pague para que la seduzcan!

-Lo lamento, pero no me lo dijiste de tal manera, asi que...

-Ya. No importa. ¿Te dijo lo de la libreta?-Tome una hoja en blanco y escribi apresurada: "No, pero en eso estoy. Ella ya confía en mi, me hablo de su problema de imagen y del beso con Irina."

Luego de decir aquellas palabras, tanto Hikari como Sergio quedaron en mute.

-Ella... Ella... ¿Ella te conto sobre su anorexia?-Le dije que respondiera afirmativamente.

-Asi es.-La mirada de Hikari no salía de la mia. Parecia mezclarse entre lastima y culpa. Tuve que mirar a otra parte.

-¿Qué dijo sobre Irina?-Volvi a garabatear: "Su prima lejana, de Boston. En su cumpleaños numero 13"

-Su prima, Irina. En su cumpleaños decimotercero...

-No puede ser...-Desesperacion. Conocía la voz de mi ex. Senti desesperación. Y lo conocía tan bien que presentia como sujetaba su poco cabello y lo tironeaba. Entonces, sucedió algo que ni yo podría habérmelo imaginado, rompió a llorar.

Entre los dos, quedamos estupefactos oyendo el leve gemido triste desde el altavoz.

Hikari sujeto su rostro, dejando salir el aire. Yo ya no sentía ni gracia ni alegría. Senti pena, porque si no supiera que el era mi malnacido ex, si no conociera su cara e historia de vida, solo tendría el sonido del llanto de un hombre.

Y se que a los hombres no se les da de llorar abiertamente frente a nadie, menos a Sergio.

Robarle una lagrima a Sergio era mas difícil que llueva en marte. Asi de complicado, seguro y cerrado era. En nuestra vida en pareja, solo le vi llorar dos veces: La primera, cuando murió su abuela, la segunda, cuando lo regañaron en un empleo.

Pero entonces, recordé el dolor. MI DOLOR. Y lo fácil que me fue llorar, y lo difícil que fue dejar de hacerlo.

Quizas, el lloraba poco, pero yo, sonreía poco y todo por su culpa. Sentia mas años encimad de los que realmente tenia. Sentia temor de que cualquiera me hiera.

Me sentía vacia y sola.

Llame la atención de Hikari, este miro mi cartel, negándose con la cabeza. Fije mi mirada con cara de pocos amigos. Este, inspiro profundo, luego mordió sus labios y al final dijo:

"No puedes estar triste, tu plan salió a la perfeccion, eso era lo que querías... ¿o no? Que ella dejara de amarte, que se olvidara de ti... que encontrara otro hombre que le diera lo que no encontró en ti. Tendras lo que quieres, lo prometo."

Y asi, colgó.