-¿Cómo dices?
-La mitad de lo que tienes es lo que valgo, asi que... si eres, gerente... somos gerentes...-Ancle una ceja, mientras Cher sacaba los papeles colocándolos sobre la mesa.
-Firma ahí.-Sergio tomo el papel, aun con los ojos en blanco, fijándose en mi, luego bajo y leyó.
Se echo a reir sin parar.
-¡Debe ser una broma!-Siguio riéndose, mientras nosotras con la cara quieta en la sonrisa, seguíamos mirándolo.-¿Qué? ¿Es en serio? ¡¿Bebiste pintura o que, Nerea?! ¡No te dare la mitad de todo! ¡estas loca!
Lanzo los papeles lejos, poniéndose de pie, caminando de lado a lado.
-Dime, Cher... considerando la edad, el peso, la carrera y un fraude, ¿Cómo actuara la empresa frente a esto?
-mmm...-Cher puso sus dedos sobre su mentón.-Pues... primero, despido inmediato, vergüenza publica, imposibilidad de concesguir un puesto similar, siquiera si tiene la suerte de que termine trabajando en un Burger King para limpieza... y...
-Okey, Okey... lo entiendo... me tienes.-Solto el aire, mientras buscaba una pastilla. Su descongestivo, Sergio sufria de acidez. Otra victoria.-Firmare los papeles y me daras la libreta... ¿de acuerdo? Sera confidencialidad absoluta. ¿Esta bien?
-Bien.-Dijo Cher.-Pero queda el detallito de mis honorarios.
-¿Qué?-Miro incrédulo.-¿Cómo dices?
-Oh, si... ¿No te lo dije? Tenemos una hermosa filmación de ti intentando atacar a Nerea en el edificio, ¿lo olvidaste?
Le entregue mi teléfono, mientras Cher marcaba.
-Oh, lo siento, ¿puedes buscarlo en la galería? Es que soy torpe con esto de la tecnología.
Sergio exalando con molestia, ingreso a mis archivos. Su cara perdió el color de inmediato.
Ambas nos dimos una mirada complica. En la galería, un sinfín de fotos mias con Hikari. Habiamos hecho una especie de sesión fotográfica.
"-Ahora chicos, una tierna, medio beso y ojos de tortolitos...-señalo Cher, mientras el me rodeaba el torso desnudo.
Aun asi, se notaba que no estaba feliz con la idea.
-¿Qué ocurre?-pregunte con media sonrisa.
-¿Si sabes que estoy teniendo sentimientos encontrados sobre tu plan?
Rei mientras Hikari bajaba su mirada con tristeza.
-¿Y no los tenias cuando me engañabas?-Dio una muesca de molestia.
-Te amo y lo sabes. Esto es cruel. Incluso para hacérselo a Sergio.
-¿Cher no dejas a solas un segundo?
Cher se marcho, dejándonos en silencio, envueltos en sabanas.
-¿Qué te ocurre? Tu no eras asi.
-Tienes razón.-Replique.-¿Sabes que pasa cuando le privas de oxigeno al corazón? Se detiene. Eso es lo que me pasa.
-Oh vamos, Nerea. ¿Crees que verlo sufrir te hara bien? El fue el amor de tu vida. Lo amaste, por muy malo que fuese... y...
-ahorratelo.-alce una mano, sentándome en la cama de espaldas a el.
-¿Qué es lo que te mueve?-Dijo pasándome su mano sobre mi espalda, haciéndome tener escalofrio y un temblor involuntario.
-Antes, era el amor... ahora es el odio."
El recuerdo se esfumo, cuando Sergio al fin dio con el video, reproduciéndolo.
-¿Y planean también extorsionarme con esto?-Amplio su sonrisa de forma altanera.-Eso, es un crimen.
-Oh, no hermanito.-Cher sono adorable, cuando en realidad, daba miedo.-Solo seria una especie de favor... ya sabes, no quisiera verte preso por violencia de genero.
-¿Y como lo harias si ya no existe tal video?-Apreto sobre la pantalla.
-¿ves? Es por eso que a tu edad, solo eres un gerente. Yo, ya seria presidente de una empresa.-Cher dio una risita, tapándose la boca.-¡Tenemos una copia tontito!
El rostro de mi ex se desfiguro.
-Oye, Nerea, dime... ¿tu eras amiga de la esposa del jefe de Sergio, no es asi?
-Asi es. Muy buena amiga. Nos invito a su cas el año pasado en las vacaciones.
-Oh, y ¿no es ella una feminista implacable?
-Si, asi es.
-¿Y tienes su correo electrónico?
-¡De acuerdo! ¡De acuerdo! ¡Lo hare! ¡Te pagare! ¡Maldita sea! Pero mas les vale que no vuelvan a intentar estafarme.
-Tu tranquilo, Sergio. Solo... tendras lo que mereces.
Mirando de lado, Sergio fue firmando papel tras papel. Cada trazo, significaba una pequeña victoria.
Para el final, solo quedaba darle la libreta.
Sergio, sujeto el objeto y cuando al fin lo tuvo en su poder me hablo:
-¿Crees que ganaste? Lo que acabas de venderme no tiene precio. Podrias haberme quitado todo, incluso si se lo vendías al jefe, el te hubiera dado una fortuna, no la miseria que pedias... pero veo que aun eres nueva en esto de ser mala.-Rei de lado.
-En realidad, si me lo hubieses pedido de forma cortes, te lo hubiese dado sin pedirte ni un centavo.-Los ojos de Sergio, se llenaron de lagrimas, solo un segundo. El era muy hombre, y habia sido derrotado.
-¿Qué paso con esa dulce chica que conoci hace años? ¿Que siempre me llenaba de besos, que era graciosa, feliz, alegre y postiva? ¿Qué nos paso, Nerea?-Dijo soltando el aire con fuerzas en un suspiro resignado.
-¿Recuerdas que te pedi que no aparecieras cuando estuviera bien?
-No lo hice.
-No. Pero has interferido, es lo mismo... y lo cierto es queria olvidarte, no queria vengarme, solo queria volver a ser feliz...
-¿Y crees que eres feliz? ¿Qué ese tal Hikari te ama?-Sonrio de lado.-No te ama, no lo hace. Yo le pague para que te olvidaras de mi. Asi que no es un triunfo. No eres feliz, porque fue un engaño.
Sus palabras querían herirme, pero parecía mas que el herido era el.
-Lo se.-Musite con lagrimas en los ojos.-Tenia la oportunidad de que me amen, de que esta vez alguien se fije en mi, que hiciera todo lo que tu no hiciste. Me lo merecía, Sergio, merecía ese amor... ¿y sabes que? Me lo quitaste. No me dejaste hacer mi luto en paz.
-Yo...
-Me usaste, usaste a todos para conseguir una tonta libreta.
-¿Cómo dices?
Me quede en silencio, conteniendo el llanto.
-lo sabias.-Dedujo.-No queria pedírtelo porque... pensé que... serias como yo... que usarías eso a tu favor, yo lo hubiese hecho, mas en los términos en los que te deje... sabia que fui una mierda contigo... si querías a alguien mas, al menos, volverias a estar bien. Fue mi error. Todo.
-Tranquilo, ya no quedan resentimientos...-me acerque a el, sujete su hombro y con todas las fuerzas le susurre al oído: "Te libero"
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Muy VIEJA para tanto DRAMA
Romanzi rosa / ChickLitÉsta podría ser mi historia... o no. Nerea, tras un largo matrimonio es dejada por su marido. Ella no tiene carrera, dinero, estudios o en quién refugiarse. Para lograr superar a su ex, tendrá la ayuda de su psicólogo y los consejos del dueño de un...