Cap. 63

184 15 0
                                    

Luche. Con ira y violencia, gritando como una histérica.

-¡Sueltame! ¡Dejame! ¡Ayuda!-Pero nadie hacia nada, nadie salía de la seguridad de su hogar.

PArecia el demonio de Tasmania, cuando en eso, Cher se lanzo desde su espalda, ahorcándolo con sus débiles brazitos.

Sergio me dejo escapar, chocando ahora su cuerpo contra la pared, dejando a su hermana inconciente.

Verla caer, me devolvió las energías para luchar. Tome un trozo grande de cristal, empuñándolo como si fuera mi santa espada.

-Vete.-Señale las escaleras. Sergio rio, acercándose a mi.-¡¿No me oyes?! ¡Que te vayas!

Movi la punta, alcanzado a tocar la palma de su mano, que sangro de inmediato. Sergio retrocedió varios pasos tambaleante.

-¿Cómo puedes hacerme esto después de todo lo que hemos pasado?-Comenzo a llorar, con la cara enrojecida.

-¿Cómo pudiste TU hacerme esto después de todo lo que hemos pasado?

-Yo te amo.

-No, no Sergio.-Negue con la cabeza.-Tu no me amas, te amas a ti. Amas a la persona que eras conmigo. A como te hacia sentir... eso, no es amor. Asi que ve, con tu nuevo puesto de gerente, con tus vacaciones caras, con tu carisma y tu llamativo personaje a seducir a otra... yo soy poca cosa para ti, ¿Recuerdas? Soy vieja, gorda y fea.

-Te extraño, te necesito para vivir... ¿No ves en lo que me he transformado sin ti?-Se señalo a si mismo.-¡Soy un desastre! ¡Solo tu puedes salvarme!

Camino de nuevo a mi, alce el vidrio, tambaleándome las manos. Entre tanto y detrás de el, Cher se recomponía.

-Siempre has sido eso... yo no tuve nada que ver. Yo te di la mejor versión de mi, yo intente hacerte feliz, aunque claro, eso antes no significaba nada para ti... no cargo con ninguna culpa ni lastima, porque de mi puedes decir muchas cosas, pero jamás que no te ame, ¡Te ame como a nadie en mi vida!-Me esforcé por no llorar.-¡Y fuiste tu, y solo tu, quien mato ese amor! ¡Alejate de mi!

-¿Por qué...?-Susurro. A penas, con su mirada triste, con el vacio en su alma. Lo reconocia, era el mismo vacio que vi en mis ojos cada maldito dia de mi vida las primeras semanas. Era la misma pregunta que yo me hice:

"¿Por qué? ¿Por qué dejaste de amarme? ¿Por qué no te baste? ¿Por qué te fuiste? ¿Por qué me heriste? ¿Por qué me humillaste? ¿Por qué te alejaste cuando mas te necesitaba?"

"¿Por qué? ¿Por qué tu has logrado seguir y yo no?"

Hay muchas variaciones y preguntas encerradas en el "¿Por qué?", y quizás, todas las respuestas se cierran en una sola: Porque si.

Cher tomo su móvil, con cuidado y marco el 911, puso el alta voz.

-Decide, o te marchas o llamamos a la policía y vas preso de por vida.-Miro por detrás, su hermana ya de pie, a cuestas, sosteniendo el altavoz.

"911, ¿Cuál es su emergencia?", la voz de la operadora como una maquina.

Sergio se recostó sobre la pared, dejando una marca de sangre sobre el palido cemento.

Puso un cigarrillo en sus labios con cuidado suspirando con molestia.

Luego, fue bajando por las escaleras con lentitud, mientras las dos lo mirábamos descender, desafiantes. Cher con su teléfono, yo con el trozo de vidrio.

...

Puse un pedazo de carne sobre su mejilla. Una leve expresion de molestia me hizo sentir lastima.

-¿Qué paso?-Pregunte con suavidad.

-Llego y se encontró con que su llave no encajaba, entonces, yo Sali, pensando que eras tu. Se enfando. Me dijo que esto de seguro era cosa mia, y que tu estabas tan arisca por mis consejos... Ouch, Ouch... Ouch...-Gimio mientras reacomodaba la carne helada sobre el moretón.-como sea, el marica me tomo de los brazos, obligándome a darle un modelo de la llave. Me negué. Fue allí cuando me golpeo...

-es un imbécil.-Rugi.-Jamas habia hecho algo asi. ¡Estoy sorprendida!

-Yo también.

-¿Por qué no llamaste a la policía?

-¿Qué? ¿y arruinar el plan? ¡Ni de joda!-Cher tomo la bolsa y se puso en pie, caminando a la puerta.

-¿Cómo? No seguiremos, no asi. Esto se ha vuelto peligroso.

-Nerea, de denunciarlo, como mucho pase una noche en la cárcel, y luego salga. No. Yo no quiero ser una simple mosca en su sopa, quiero ser su indigestión completa. Quiero quitarle las ganas de comer al maldito.

-Pero Cher... ¿No tienes miedo?

-¿Temerle? ¿a el?-Rio alto.-Es un inculto, un violento, un ser de pocas neuronas que recurre a la violencia y la intimidación para lograr su cometido cuando alguien no cae ante su sonrisa. No. No le temo. No permitiré que una persona de intelecto menor me gane. No es justo, no debería temerseles a esa clase de personas.

-Pero... podría haberte herido.

-Hey.-Sujeto mi hombro.-Si tu te enfrentaste a el, aun cuando te doblaba en peso, yo puedo hacer lo mismo. Es justo en estas situaciones donde nacen los valientes...

Ambas nos sonreímos.

-Entonces... ¿mañana será el gran dia?

-Asi es... mañana le daremos su golpe.-Y asi, Cher se marcho.

ovio-���hf

Muy VIEJA para tanto DRAMADonde viven las historias. Descúbrelo ahora