Capítulo 7

1.6K 128 1
                                    

En sus planes de venganza iniciales no entraba la chica.

Él no era como los Espinoza, no era como Santiago Espinoza, que había seducido a Victoria, dejándola embarazada y abandonándola después.

Sin embargo, jamás podría haber imaginado que la hermana de su mayor enemigo fuera a abordarlo de esa manera. Ni tampoco, y aquello era aún más intrigante y peligroso, que estuviera sintiéndose tentado de bajar la guardia, que estuviera a punto de resquebrajar el férreo control que tanto se había esforzado por mantener sobre sí mismo. No era contrario a utilizarla para conducir a su familia a la destrucción, pero nunca se habría esperado sentir aquel deseo arrollador hacia ella.

Christopher: Supongo que sí –murmuró.

La expresión desafiante que había en los ojos de Dulce flaqueó. Fue sólo un instante, pero no le pasó desapercibido, y algo dentro de él rugió triunfante. Aquella fría indiferencia suya no era más que una fachada, era evidente.

Alargó la mano y deslizó la palma por detrás de su cuello para tomarla por la nuca. Aquel contacto fue como una descarga eléctrica.

Ella abrió mucho los ojos y apoyó las manos en su pecho.

Uckermann se lo tomó con calma, consciente del interés de los curiosos que los rodeaban. No sabía a qué estaba jugando Dulce Espinoza, pero sí sabía que no tenía ni idea de con quién estaba jugando.

Prácticamente ya había ganado la batalla, y estaba dispuesto a valerse de Dulce para destruir el imperio Espinoza de una vez por todas, igual que ellos habían estado casi a punto de destruirlo a él tiempo atrás.

Sin embargo, en vez de saborear esa victoria que casi podía tocar con la punta de los dedos, centró su atención en los sensuales labios de Dulce, y la atrajo hacia sí.

Por Amor & VenganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora