Capítulo 20

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  LAUREN'S POV

Camila venía entrando a la cocina, estaba desayunando las tostadas que había preparado Hanna, era Domingo, sí, otro fin de semana en la casa de Camila y no recordaba la última ves que había dormido tan bien en tanto tiempo como lo hice este último mes. Venía frotándose los ojos y cuando quitó su mano estaban un poco hinchados, quizá de tanto dormir.

-Buenos días- le dije en tono sarcástico.

-Hey, vamos a ir a Chicago, ¿quieres venir?- soltó de repente, acercandose a mí para rodear mi cuello en sus manos y meterse entre mis piernas.

-Creo que he terminado con todos mis deberes, puedo ir...-

-Necesito que vayas...- me plantó varios besos en los labios y la rodeé por la cintura para apretarla contra mi cuerpo.

-¿A qué hora nos vamos?- Camila se dió  la vuelta para servirse el desayuno.

-En una hora, George nos llevará al  aeropuerto para irnos en el Hubberman 42- empezó a comer.

-¿Le pones nombre a todos tus medios de transporte?- pregunté.

-Sólo a los aéreos y marinos- dijo muy seria y yo esbocé una sonrisa.

-Suena sofisticado-

-Anda come y después nos vamos a dar una ducha- Camila llevaba la mitad y acababa de empezar.

-¿Juntas?- sonreí picaramente.

-Sigue soñando Jauregui - terminamos de comer y Camila fue la primera en meterse en su baño a dar una ducha. Opté por ir al tercer piso ordenar mi ropa y ducharme.

   Camila me esperaba viendo la T.V. , llevaba un vestido color salmón y el cabello recogido en una media coleta, llevaba unos tacones color crema a juego. La morena era perfecta, un poco más baja que yo, con su personalidad increíble, sus labios tan carnosos , su aroma y el gran culo que se cargaba la hacían irresistible. Me pasé los labios imaginándome besarla en medio del muelle a la vista del lago.

   Se levantó e inmediatamente la tomé por la cintura para pegarla contra mi pecho.

-Te ves hermosa- susurré en su oído.

-Tú también- la tomé de la mano y salimos. George estaba montado en un Sentra color negro, esperándonos.
Camila llevaba una pequeña mochila, mientras yo cargaba con un pequeño bolso negro. Llegamos al aereopuerto en 30 minutos y por sorpresa su familia ya estaba allí.  Camila se bajó del auto sin despedirse de su chofer y corrió hasta donde estaba su familia.

-Gracias George, te marco para que regreses por la noche, buen día- me bajé con cuidado del lado.

-Igualmente señorita Jauregui, espero su llamada- cerré la puerta y el coche arrancó.

   Me giré para ver a una Camila con Sofía colgada a su cuello, ambas estaban riendo y por la forma en que sonreían se veían felices, pronto Camila bajó a su hermanita poniéndose de cunclillas para empezar a hablar animadamente con todos los pequeños, sus tíos la miraban unos metros atrás, encantados.

-¡Lauren!- exclamó Sofía en cuanto me vio y corrió hacía mí abriendo sus bracitos.

   La cargué y exactamente era una copia de Camila, pero más pequeña, Camila traía a un pequeño alrededor de su cuello y ambas nos acercamos a sus tíos.

-¡Tía! Tenemos que salir mucho más seguido- de esta manera saludó Camila a su tía quien respondió con besos en ambas mejillas.

-Hay que hacerlo Mila- asintió.

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