One Love ❤️

Capítulo 28:

Capítulo 28

Camila's POV

   Justo eran las 8 en punto cuando tocaron el timbre. Hanna corrió a presionar el botón del altavoz.

-Es la señorita Ariana- avisó.

-Dile que salgo en 2 minutos- me vi una vez mas en el espejo de la sala, un vestido negro, mi cabello suelto hasta la cintura y unos tacones a juego, feliz de mi elección tomé mi bolso y salí de la casa.

  La puerta trasera del Hudson estaba abierta para mí. George estaba ya en el asiento del piloto listo para arrancar. Me despedí de Hanna con la mano, ella sonrió y me vió hasta que salí de la casa. Ariana estaba afuera con un vestido rosa por arriba de las rodillas, traía el cabello recogido en una coleta, y un collar plateado que hacía verla perfecta. Abrí la puerta para que ella subiera con cuidado.

-Hola- dijo apenada.

-Te ves muy linda- ella se sonrojó pero no me quitó la mirada de encima.

-Tú también te ves muy bien- se mordió el labio inferior. Quizá provocándome.

   Ariana era muy diferente a como se veía en la empresa, todo el tiempo se estaba sonriendo y era muy risueña, carismática también, poco a poco nos dimos la confianza que no se había logrado en tres meses a pesar de que nos veíamos diario.

   Llegamos al restaurante, era el Holiday's, mi cabeza pensó en Lauren, pero ahora venía con alguien más. No podía pensar en ella agité la cabeza cuando ya estábamos sentadas la una frente a la otra, listas para ordenar.

-¿Estás bien?- preguntó.

-Sí, todo perfecto- le sonreí. Y ella me devolvió la sonrisa, haciéndome olvidar  todo.

   Después de casi dos horas allí, platicando y comiendo,  ambas satiafechas, habíamos entrado en un ambiente que no había visto jamás, era como si pensáramos lo mismo, compartíamos muchos gustos y estábamos de acuerdo en casi los mismos ideales. Pagué la cuenta y sólo nos restaba acabarnos las copas de champaña.

-¿Quieres seguir la fiesta?- preguntó con una ceja levantada.

-Vamos...- llamé a George y en 10 minutos ya estaba recogiéndonos de aquél restaurante. Paramos en un antro cerca del centro de los Ángeles, el lugar estaba repleto, pero conseguimos una mesa para dos en la sala V.I.P , veíamos desde arriba a todos los chicos bailando y besándose unos con otros.  Algunos que estaban en la misma sala me reconocieron y se tomaron fotos conmigo. Pedimos shots de tequila para empezar bien la noche, apenas eran las 11 y había una energía perfecta.

   Después de varios tragos de diferentes bebidas empezaba a marearme. Ariana parecía seguir intacta a pesar de haber tomado más que yo.

-Parece que haces esto a menudo ¿no es así?- pregunté.

-¿por qué lo dices?- nuestras sillas estaban pegadas y rozábamos nuestras piernas. Al igual que su boca se acercaba mucho a mi oreja para que pudiera escuchar lo que decía, ya que la música inundaba el lugar.

-Haz tomando muchísimo y no te veo ni  un poco borracha. Yo estoy algo mareada- el piso volvió a moverse y me entraron ganas de bailar.

-Aún no lo estoy, pero empiezo a sentirme mareada- mi sonrisa se ensanchó, no era inmortal como pensaba.

-Vamos a bailar- solté de golpe.

   Bajé de la silla tendiéndole la mano a Ariana, la tomó y como pudimos, llegamos al medio de la pista. Hace mucho tiempo no bailaba ni me divertía así con alguien... No desde... Lauren. Recordé la primera vez que la había visto, cuando chocamos en el pasillo de Blurryface en mi primera junta de la empresa. De pronto me pareció ver sus ojos verdes a lo lejos, me detuve al instante para poder lograr concentrarme en la persona que había visto. Pero me di cuenta de que sólo había sido una alusión, no era ella, era otra persona. Lauren quizá estaría con una chica, cerré los puños, o quizá un chico. Volví a agitar lentamente la cabeza para sacar esa idea de mi mente.