Capítulo 14:

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Lauren's POV

   Los doctores aún no salían de la sala donde se habían metido junto con Camila, ¿qué tanto estaban haciendo? Los enfermeros me miraban con curiosidad por que no paraba de dar vueltas a la pequeña sala de espera.  Habían pasado 2 horas y no se me ocurrió marcarle a nadie, el celular de Camila vibró, sin mirar lo pegué a mi oreja.

-¿Camila? ¿Donde estás?- preguntó Selena preocupada del otro lado de la línea.

-Estoy en el hospital Selena...-empecé a llorar sintiendo un nudo crecer en mi garganta.

-¿Qué pasó?- la escuché alterada.

-Se cayó a un barranco, no sé cómo Selena... Yo..- la voz se me quebró.

-Voy en camino, ¿estás en el hospital de Los Ángeles cierto?- escuché su coche arrancar.

-Sí, te espero..- sollocé una vez más y colgué, eran las 4:30 de la mañana y no había pegado un ojo.

  La puerta se escuchó y me levanté acercándome al doctor.

-¿Cómo está?- lo arrinconé.

-Se encuentra estable, pero ha perdido mucha sangre y tuvo una contusión cerebral, tuvimos que operarla del brazo, ahora mismo está recuperando la conciencia.- informó.

  Suspiré como nunca antes lo había hecho.

-¿Puedo pasar a verla?- pregunté.

-Claro, solo debe llenar un formulario y enseguida la llevo a su habitación- lo seguí con prisa, escribí lo más rápido que pude y me llevó hasta el ascensor.

-¿se recuperará pronto? - lo miré y me sonrió tranquilizándome.

-Lo hará, pero debemos de tenerla el fin de semana aquí, una contusión cerebral y haber perdido la conciencia no es bueno, la tendremos en observación- se abrieron las puertas y comenzamos a caminar por un largo pasillo, todas las puertas estaban cerradas como era de esperarse, llegamos a la última y tocó la puerta.

-Adelante, la veo en un rato- me dijo y se fué.

-Pase-dijo Camila y se me paró el corazón, abrí la puerta, estaba reclinada en la cabecera con una bandeja de comida enfrente de ella, esbozó media sonrisa al verme, en menos de un segundo, su mirada estaba de nuevo en su plato.

-¿Cómo estás?- vi su brazo izquierdo enyesado, sus gasas en la cabeza y una venda en la pierna, ya no llevaba su ropa, ahora estaba con una bata verde, típica de los hospitales.

-Creo que bien...- me dijo sin mirarme, sólo contemplaba su comida.

-¿Me puedo sentar?- señale la cama a un lado de ella y mientras ella contemplaba su plato asintió. Tomé asiento para entrelazar  su mano buena con la mía, tenía conectado una vía a un suero y no me había  dado cuenta pero estaba conectada a una máquina de electrocardiograma, la máquina aceleró y ella se puso roja como un tomate. Sonreí recordando el beso de hace rato.

-Yo... Te vi mal Camila, tenía miedo de perderte- susurré.

-No me perderás nunca Lolo...- volvió a esbozar media sonrisa y me miró a los ojos, otra vez el electrocardiograma aceleró su ritmo. -¿Por qué lo hiciste?- me preguntó.

-¿Hacer qué?- pasaba mi otra mano por sus dedos trazando sus venas.

-Besarme Lauren, sabías que quería hacerlo...- se volvió a agachar y levanté su barbilla con un toque haciendo que volteara a verme.

-Quizás yo también quería hacerlo...- nos miramos a los ojos y me acerqué a sus labios.

-¿Sigues borracha?- dijo apartándose lentamente.

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