Capitulo 55.

570 36 0
                                    

Durante las ultimas semanas, probablemente esto es lo que habrías visto (aunque no siempre):

Yo saliendo con mi hermanastro. Nuestra distancia era respetable, y si eramos afectuosos siempre lo hacíamos parecer como algo 'familiar'. No me malinterpreten, aun peleábamos y discutíamos. Aveces eran por tonterías, aveces porque me la pasaba quejandome de que me dolían los pies de tanto caminar, y aveces porque yo 'coqueteaba' con algun ex novio. Para ser honesta, aveces lo hacia a propósito porque todos sabemos que Tom es un coqueto por naturaleza. Si nos encontrábamos con personas conocidas, ellos solo sonreían y pensaban en lo maravilloso que es que nosotros, como hermanos, nos tuviéramos tanta confianza. Pero claro, no tenían ni idea de hasta donde podía llegar esa confianza. No pensé que era un problema en lo absoluto. Eramos cuidadosos. Eso si, follábamos en lugares riesgosos, como cuando estábamos en el cine o en la limusina. Bueno, ¿que mas puedes esperar de nosotros? Si abres mi cuarto alrededor de las diez de la noche, esto es lo que puedes encontrar: Piernas enredadas, unas ligeramente peludas (las de él, claro) y una delgadas y suaves (sin duda, las mías). Su pierna izquierda debajo de mi pierna derecha, y su otra pierna colocada cómodamente en una almohada mientras que mi otra pierna estaba doblada hacia arriba. Nuestros cuerpos descansaban cómodamente. Íntimamente, asi de la forma en que duermen dos personas que se conocen muy bien físicamente. Él estaba profundamente absorbido en su libro mientras yo estaba ocupada mirando el techo. Su cuaderno estaba sobre la mesa de noche y yo hace tiempo había renunciado a mis intentos de leerlo (al menos por ahora).

— ¿Tom? —Da vuelta a la pagina y me mira— ¿Has escrito sobre Karina ahi? —Pregunto, apuntando hacia el cuaderno. Él duda antes de responderme.

— Si.

— ¿Quien es ella?

— ______, ¿porque tienes que saber todo sobre mi?

— No quiero saber todo. Solo quiero saber de ella —Pone su libro sobre la cama y me mira.

— Hoy no, ¿ok? —Hago pucheros. Su expresión no cambia. Yo lo miro a los ojos, y sigue con la misma expresión en blanco.

— ¿Ella me va a alejar de ti, asi como yo te aleje de Selena?

Su expresión en blanco se convierte en una sonrisa divertida.— No sabia eso, ____. ¿Tu me alejaste de Selena? Y yo que pensé que era porque me la encontré follandose a otro.

Los dos nos reímos, y luego la curiosidad vuelve a apoderarse de mi. — ¿En serio?

— Aja.. —Su dedo comienza a trazar círculos sobre mi estomago. Me retuerzo un poco, pero ya estoy empezando a acostumbrarme a sus caricias casuales. Incluso es reconfortante.

— ¿Lloraste e hiciste un escandalo cuando te puso los cuernos?

— No, hermanita. De nuevo estas confundiendo lo que yo haria con algo que harías tu. Como veras, soy un hombre muy civilizado. Simplemente hablamos las cosas y decidimos que seria una perdida de tiempo seguir con la relacion.

— Huy que maduro. ¿Tomaron té y galletitas después? —Me burlo, tratando de agarrar su brazo cuando empieza a tratar de hacerme cosquillas— ¡No!

— ¿No que? —Baja la cabeza a mi cuello. Empieza a besarme ahi. Las cosquillas han cesado, pero fueron seguidas por su mano acariciando la parte interna de mis muslos.

— No pares.. —Empujo su mano hacia arriba con impaciencia, donde sus dedos comienzan a hacer lo suyo— Oh, mierda..

— Ok —Murmura, sonriendo cuando sus labios se cierran alrededor de mi pezon. (Oh, fuck fuck fuck..)— Vamos a follar si quieres..

Confesiones. Tom Kaulitz.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora