Confesiones. Tom Kaulitz.

Capitulo 89.

 
Jared ya estaba sentado en el bar del hotel cuando llegue. Como todo un caballero, se pone de pie para saludarme. Sus ojos parecen sorprendidos cuando nota que tengo el anillo de Lucas alrededor de mi cuello. No me importa lo que digan, me gusta ponermelo. Me gusta sentir la plata fría sobre mi pecho. Mi anillo de compromiso descansa dentro de mi joyero por ahora. El final feliz que tengo guardado por si acaso.

— ¿Quieres un trago?

Me siento.— No venimos a beber ni a socializar, Jared. Ve directo al grano.

— Un trago primero —Llama al barman  con la mano y pide un martini para mi— ¿Por qué estas tan amargada, _____?

— Ya te dije. No me gusta encontrarnos de esta manera.

Jared mira su reloj luego me mira con esa sonrisa tan apuesta.— No vamos a tener sexo, si eso es lo que te preocupa. Digo, no tengo ningún problema con tener sexo contigo, pero si piensas que te voy a obligar a hacer algo que no quieres, estas equivocada. No va a pasar.

— Supongo que no debo sentirme ofendida por eso.

— En verdad te encuentro muy atractiva. Eres una mujer hermosa. Solo digo que soy capaz de controlarme a mi mismo.

— ¿Y eres un psicópata como tu hermana o si sentirías algo si mataras a alguien? Ya sabes, existe algo que se llama remordimiento de conciencia y creo que tu hermana no conoce el significado de eso —Tomo un sorbo del martini que el barman coloca frente a mi. No pensaba beber, pero creo que lo necesitaba.

Sonríe, obviamente entretenido por mi comentario— Bueno, he hecho cosas en mi pasado… pero no soy como ella. Yo si siento cosas.

— ¿Sientes culpa?

— Si.

— ¿Te sientes culpable de joder a una mujer que esta prácticamente loca?

— No —Se encoge de hombros— ¿Te sientes culpable de que vas a conspirar conmigo para volverla literalmente loca solo para que puedas tener a Tom para ti sola?

— ¿Acaso dije que estaba de acuerdo con esta “alianza”?

— Sabes que estarás de acuerdo y aceptaras —Me mira directamente a los ojos, cosa que me pone incomoda— Sabes, este triángulo amoroso tuyo me divierte. No es que me importe un comino pero, ¿cual Kaulitz quieres? Cuando Lucas deje a Hannah lo más probable es que vuelva a ti. Lo mismo pasará con Tom cuando deje a Karina. ¿Así que con cual te quedaras? ¿O te quedaras con ambos al mismo tiempo?

— ¿Que tal si dejas de tratar de analizar mi vida y me dices porque diablos estoy aquí?

— Que encantadora eres —Dice, sarcásticamente— Nadie me habla asi.

— ¿Y que haces con las personas que lo hacen? ¿Las cortas con tu espada? —Sigo burlándome de él, tratando de distraerme de su voz y encanto.

— Nadie me ha hablado de esa manera —Repite, esta vez su mirada se endurece— Nadie.

— Bueno, aquí estoy. Supongo que hay una primera vez para todo.

Hace una pausa, observándome mientras paso mis dedos por la copa de mi martini distraídamente— Hannah ha querido ver a Karina muerta por años —Admite— Es por eso que se que Lucas es una amenaza para mi. Para nosotros. Alguien que pueda hacer que Hannah deje ir algo asi tan fácilmente solo puede significar problemas.

— ¿Y porque quiere ver a Karina muerta?

— Es estúpido, en realidad —Se lame los labios. Trato de no pensar en las cosas que podría hacer con esa lengua. Maldita sea, ______. Deja de pensar en eso— Pero era importante para ella, así que la apoye.