Mi salvadora -L

Mentira

NARRA Az. M.

Voy a la cocina a ver que puedo comer. Hay cosas enlatadas en su mayoría y empaquetadas, así que tendré que preparar algo yo misma. Por ahora se me antoja un poco de pastel.

Cocino uno de fresas y chocolate y lo guardo en un refrigerador que hay. Luego tomo una rebanada y me la como, junto con una taza de café con crema en polvo.

Me la paso deambulando por el piso, hasta que decido que hacer y me pongo a buscar las camaras. Ubico todas, y luego busco los microfonos. De estos no hay tantos, pero cuestan mas trabajo encontrarlos y así pasa el tiempo hasta que anochece.

Acomodo ahora varias colchas en la tina de baño y después de cenar más pastel, lavarme los dientes y ducharme, me acosté a dormir de nuevo en la tina.

Al menos L ya no me ve al bañarme y dormir...

La manija de la puerta gira y luego se abre la puerta de cristal.

-No tapes las cámaras. Debes estar vigilada en todo momento- dice L

-Solo queria un poco de privacidad...

-¿No te quedó la ropa?- pregunta y se lleva su pulgar a los labios. Se apoya en el borde de la tina con la otra mano y me mira fijamente. -Sigues usando toallas y durmiendo en el baño.

-No es eso. No es tanto mi estilo- digo

-No entiendo. El día en que te trajimos venias con algo parecido.

-Pues si pero... No es tanto mi estilo. Me puse eso para ir a visitar a un amigo.

-¿Que amigo?

-Uno que... Que desapareció después de que lo fui a ver.

-Hmmm... Otra cosa, ¿Como te llamas? No encontré mucha información sobre ti. De hecho, Watari no encontró nada.- comenta cambiando repentinamente de tema

-¿Watari? ¿Él sabe que estoy aqui? Tengo que hablar con él. Por favor L, dejame...

-No. El no sabe que estás aquí, se supone que te debía liberar. Watari negó que fueras Kira y te dejó en un lugar cómodo, osea aquí. Se supone que después de cuestionarte unas cuantas cosas, debia dejarte ir, pero eres aun sospechosa. Dime, ¿De donde conoces a Watari? El parecía conocerte y tu pareces conocerlo a el.

-Pues... Si lo conozco, pero no le he hablado durante algún tiempo. Pero dices que parecía conocerme... Entonces si me lograra comunicar con el...

-No. Me prohibió dejarte aquí, pero yo no quería que te fueras- susurra y baja un poco la mirada.

-¿A que te refieres, L?- pregunto nerviosa

-A que no te tengo confianza y creo que le dirás mi nombre y como soy a Kira. Así que te quedarás aqui.

Se da la vuelta y sale repentinamente del baño. ¿No me tiene confianza? ¿Acaso cree que dejaría que lo mataran, o peor aun, que contribuiría a su muerte?

Las mariposas de mi estomago que me provoca desaparecen. Me dan ganas de llorar que el piense de esa manera de mi, pero al menos es una oportunidad para estar con el. Hay que ser positivos.

Me cobijo bien con las colchas y me duermo.


NARRA L

¿Como le pude decir eso? Lo peor fue que su respuesta sonó emocionada. No tenia otra opción que salir de ahí a toda prisa.

Camino fuera de su piso. Es la primera vez que le miento a Watari en algo, pero de verdad quería que se quedara y el no me dejaba. Inventé el decirle a ella que es sospechosa, aunque en realidad la descarte casi desde el primer día. Solo que... Hay algo en ella. Quiza es porque es la primer chica que besé en mi vida y se llevó parte de mi ADN, o que es demasiado bonita, o que sabe mi nombre y quien soy, pero me gustaria que se quedara un poco más. Claro, es definitivo que ella no le diría a Kira quien soy o como me llamo, pero el podría amenazarla. Es por lo que Light no se le acercará, el es el mayor sospechoso de ser Kira. En un 70%.

En cuanto al equipo de investigacion que la atrapó, les dije que me sentía paranoico al ver que ella se me había acercado sin motivo alguno, y modifique las grabaciones de vídeo para que pareciera que la liberé.

Mientras que las cámaras de su habitación solo las puedo ver yo, a través de mi laptop o mi celular, que tiene varias claves.

Camino al piso de investigación Kira y me siento a ver las grabaciones del día de hoy, donde estubieron Light y Matsuda. Reviso mi teléfono por unos segundos. Ella sigue dormida. Menos mal que destape una cámara en el baño, y ahora la puedo seguir observando. Pero solo por momentos. El caso es mucho más importante que esa chica. Que cualquier chica.