Mi salvadora -L

Dormir

Reviso las camaras de nuevo, el equipo de investigacion esta dormido en dos sofás lejos de él, así que tomo el pastel solicitado.

-Disfruten de lo que les dejé preparado. Vuelvo en un momento.- les digo a los shinigamis.

Salgo de mi piso y bajo en el elevador hasta el piso de L. Abro la puerta y me dirijo hacia el.

-¿Cansado?- pregunto en susurros y le dejo el pastel enfrente de el. Le doy una cuchara.

-Si.- contesta.

Me quedo parada en silencio mirandolo comer. No aparta la vista de las pantallas. Y ahora que recuerdo yo no he comido en todo el día.

-No lo entiendo.- murmura L. - Lo único que está haciendo Light es comprobar que el es Kira. ¿Por qué sugirió el mismo que lo encerraramos? Además, ayer por la tarde afirmó no ser Kira.

Contesta como si no me uniera ignorado en todos los días pasados. ¿Por qué es así? Ya Azuki, deja ir tu orgullo.

-Quizá ya no lo es, puede que haya hecho algún truco para desviarte de seguirlo, algo para despistarte, y cuando lo logre, volverá a ser Kira. Para ese entonces, tu debes estar preparado- digo

Debo enfocarme en L. Yo también debo estar preparada. Light buscará la manera de matarlo. Debo de buscar algo para fingir su muerte.

-Hay posibilidades- dice. Y por primera vez en el día se digna a mirarme.- Gracias.

-Recuerda nuestro acuerdo- digo y me siento en la recargadera de su sillón.- Así no se agradece, Ryuzaki.

-Bien.

Paso las manos por su cuello  y las subo poco a poco a su cabello. Acerco mis labios a los suyos y lo beso.

Pero algo cambia hoy.

Es suave hasta que el sube una mano a mi espalda y me presiona hacia él con la muñeca. Entonces me acerco más a el y baja las piernas hasta quedar sentado como una persona normal. Me siento sobre el y lo beso hasta que me comienza a faltar el aire, pero si me separo será el fin del beso. No. Solo un poco mas...

Entonces el me aparta.

-No es justo...- comienzo a reclamar pero pone un dedo en mis labios.

-Shhh. Yo soy la justicia. Se qué es justo.- susurra y me mira directamente a los ojos. Mi corazón late a la velocidad de la luz- No he dormido en seis días, creo que merezco un descanso además de mis salidas al baño. Despertaré al equipo. Ambos vigilarán esta noche, y si tu quieres, puedo dormir contigo.

Abrazo a L. Esta perdonado.

-Claro que quiero...

Se levanta cargándome y enrollo mis piernas en su cadera.

-Supuse que dirías eso.- murmura- pero tendrás que salir. Voy a despertarlos.

Me suelto y camino fuera de la habitación. Después de unos minutos sale L. Por alguna extraña razón me toma la mano.

Respiro intentando calmarme. Vamos, es solo su mano. Tranquila.

¡Es su mano! Si, si, la mano del chico más inteligente perfecto y guapo del mundo, del mejor del siglo, de mi primer y unico amor. Si, ya. Tranquila. Es solo su mano.

Subimos al elevador.

Rayos... ¿Como correr gentilmente a los shinigami de mi piso?

-¿Y si vamos a otro piso?- pregunto - Todo está en la bañera y mereces descansar desde ahora.

-No te preocupes. Ahí esta bien.

Rayos.

Llegamos y corro dejándolo en el elevador. Abro la puerta.

-Ryuk, B, Hu, necesito que salgan. ¿Pueden...?

La habitación es un asco. Y ellos están tirados con frascos alrededor y pedazos de galleta.

-¿Por?- pregunta Hu

-¿No me digas que trajiste a L?- afirma B. -¿Solo dormirán o será algo más?

-Solo dormir.

Avergonzada y sonrojada.

-Veo por qué no querías que viniera- murmura L entrando- Tu habitación es un desorden.

-Lo siento L...

Los tres shinigami se ríen. ¿Qué es tan chistoso?

-Como sea. Solo necesitamos la cama.