Me despierto con el sol. Tengo una colcha encima y una caja de donas de chocolate a un lado. También hay una cadena con siete llaves. Bueno, creo que fue L. Esta es una de las razones por las que lo quiero tanto. Es muy atento y muy...
-¿Creíste que podías engañarme con todo lo que pusiste en tu cama? Para empezar, duermes en la bañera.- escucho detrás de mi
Listo. Es un maldito Genio. Mi plan era perfecto, solo olvidé ese pequeño detalle. Duermo en la bañera, no en mi cama.
-Ahora supongo que estas enfadada contigo misma por olvidar ese detalle- murmura en tono cansado
Lo miro. ¿Por que me lo recuerda? ¿Es que no se puede callar e irse y dejarme sola para lamentarme y planear mejor la próxima vez? Lastima el poco orgullo que me quedaba.
-Y no pienso irme, aunque eso quieras. Primero dime a donde fuiste - exige
No puedo... Se enojaría...
-No me enojaré si dices la verdad.
Claro, genio.
-Yo... Fui a tu universidad para vigilarte en todo momento- contesto sin mirarlo a los ojos.
-Creo que puedes estar mintiendo- dice entonces suena su celular. Lo saca con los dedos índice y pulgar y contesta.
-Watari. Si. Hmmm... Interesante. Voy para allá.
-Encontraron cosas como evidencia del segundo Kira. Tengo que irme. Tendremos esta conversación después. Esas son una copia de las llaves de tu piso, entra y evita que te vean otras personas, se supone que no estás aquí.
-Claro- murmuro. Aunque L es genial no me gusta que intervengan en mis planes, y menos con su vida en juego.- Una cosa antes de que te vayas. ¿Puedo utilizar el elevador?
-Lo menos posible. Solo evita que te vean, Azuki.- contesta y se va.
Al irse, me como las donas y bajo de la azotea con la colcha enrollada. Una vez que llego a mi habitación tomo un baño y me recuesto un poco a dormir fresca como una lechuga.
*
Cuando despierto, miro el reloj del piso. Son las dos de la tarde. Es buena hora para espiar a un L universitario. Me cambio con una falda azul, un top blanco de botones y chamarra café. Me pongo unos zapatos y calcetas que pasan mis rodillas, este parecía el uniforme. Luego, tomo el elevador y bajo hasta el primer piso. Es un alivio no tener que usar escalones. Aunque... No se que piensen sus compañeros si llegaran a descubrirme en el edificio. Tendré que inventar algo.
Pero lo que definitivamente no haré será usar los ojos para ver sus nombres. Eso estaría muy raro. Debería ir practicando el no usarlos, esta salida es una buena oportunidad.
Salgo del edificio con los mismos métodos de la vez anterior, pero menos cansada y me dirijo a su universidad. Esta vez si traje dinero.
Llego a su universidad y el vigilante de la entrada me detiene.
-Credencial- dice. Evito mirar su nombre.
-Claro, lo siento- digo y se la muestro. No nota nada extraño, como pensé y me la regresa.
-Tendremos que dar un aviso a sus padres por la impuntualidad. Las clases empiezan a las siete, no a las tres.
-Solo fui a comer algo. Si nota, no traigo mochila.
Me recorre con la mirada de arriba a abajo. Se detiene un poco en ciertas áreas pero lo dejo seguir y me concentro en dónde puedo buscar a L.
-Lo noto. Y también que ese tipo de blusa es muy provocativa. La próxima vez no la dejaré entrar si viene vestida así, está advertida.
-Entendido- murmuro y entro. Debí cerrar la chamarra antes.
Camino cuando de pronto una chica de lentes y pelo corto me empuja. Tampoco veo su nombre.
-Lo siento, es una emergencia. Mi Hideki y Light están con la mismísima Misa Amane.
¡¡¿¡Que!?!!
Me quedo en shok unos segundos. ¿Su Hideki? ¿Con... Amane? ¿Que MI Lawliet está con Misa Amane? ¿Esa modelito rubia oxigenada como le decía B?
Camino furiosa a la multitud. Entonces escucho su voz chillona.
-¡Ahh. Alguien me ha tocado el trasero!
Siempre haciendo escándalo, tratando de llamar la atención...
L corre a su alrededor y dice cosas extrañas con un tono bastante activo para ser el.
-¡Esto es indignante! ¡Tomar ventaja de esta situación es imperdonable!. ¡Encontraré al patán responsable!.
¿Qué es eso de que encontrará al...? Ohhh Ryuzaki ... ¡¿Fuiste tu verdad?!
Aviento a las personas de mi alrededor y quedó enfrente de la curiosa escena cuando Misa contesta.
-Ryuga eres tan divertido...
¡¡¡¡!!!!
Se lleva una mano al cabello y hace una mueca avergonzado. Entonces me ve por unos segundos mientras me doy la vuelta enfadada. Vaya, Ryuzaki estaba sonriendo. Qué descarado y sínico es. Nunca sonríe, solo cuando le toca el trasero a alguien. No me había equivocado en llamarlo pervertido. Se lo merece...
ESTÁS LEYENDO
Mi salvadora -L
FanfictionYo he buscado por años a mi amigo L que esta a cargo del caso Kira. Hace tiempo mi madre adoptiva y yo nos mudamos a Japón. Fue cuando obtuve la primer pista del paradero de L.