Parte 14

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-Claro, dime.- sonrió.

-¿Podrías no lanzar tantas indirectas a Erika y a Julian? – dijo Emma sin darle más rodeos. En su interior sabía que no era justo hacerle esa petición a Livvy que actuaba sin malicia alguna, no como ella, que actuaba de forma egoísta al no querer aceptar que Julian se encontrara interesado en otra cuando era precisamente lo que ella le había pedido que hiciera.

-¿Por qué? –preguntó extrañada.

-Para empezar- dijo Emma intentando ser suave- creo que no necesitan tu ayuda.-Viendo como Livvy agachaba la cabeza de forma triste, continuó.- No te ofendas, pero ya están pegados a todas horas. –Livvy esbozó una ligera sonrisa- Y segunda, no me gusta esa chica para Julian.

Livvy se paró en seco para mirar a Emma que se dio cuenta que se encontraban a un par de pasos de la puerta cerrada del salón.

-¡Pero si es perfecta para él! –Intentó susurrar - Es guapa, lista, alegre, simpática...

-Ya, ya... - le cortó Emma sintiéndose molesta de una descripción que definía completamente a Erika, aunque ella tratara de negárselo.- Es... demasiado ideal, hay algo que no me gusta en ella.

Y sin más abrió la puerta del salón dándole paso a Livvy para que entrara.

Al entrar todos se volvieron a mirarlas para instantes después seguir con sus conversaciones. En uno de los sofás estaban sentados Mark, Kit, y Ty mientras que en el otro se situaban Diego, Cristina y Erika. Junto a ella se sentaba Julian en una de las sillas y Dru y Tavvy estaban sentados en el suelo encima de uno de los cojines.

-¿Ya habéis terminado de ver la peli? – dijo Livvy recorriendo la estancia para sentarse en el reposabrazos del sofá junto a Tiberius.

Emma podría haber cogido otra de las sillas y sentarse pero, finalmente, decidió tomar asiento en las piernas de Mark mientras él le pasaba el brazo por la cintura para acomodarla.

Notó la mirada de Julian sobre ella, hecho que le halagó debido a la falta de interés por su parte en estos últimos días en los que apenas se habían visto y no habían cruzado ni tan solo una palabra.

-Yo he estado leyendo- informó Tiberius a Livvy, levantando la mirada momentáneamente de el libro, para segundos después volver a sumergirse en su lectura de Sherlock Holmes "La bufanda de lunares".

-¿Podemos ver ahora una que me guste a mí, por favor? –Dijo de forma agotada Dru en voz alta desde su sitio- ¿Alguna gore?

Tavvy se levantó rápidamente para dirigirse hacia Jules y darle un fuerte abrazo escondiendo su rostro.

-No me gustan esas –le dijo tristemente hablando en su camiseta.

-No te preocupes Tavvy, no vamos a ver nada de terror.- anunció Mark mirando de nuevo a Dru quien lucía exasperada.

-¿Te gustaría ver alguna cosa en especial, Erika?- le preguntó Julian con una sonrisa mientras soltaba a Tavvy que volvía de nuevo a su sitio.

Emma se fijó en que Erika lo miraba con especial dulzura después de ver la reacción de Tavvy.

-No sé, alguna comedia romántica, quizás.- respondió esbozando una sonrisa y levantando las cejas.

Sin querer seguir oyendo la conversación entre Jules y Erika, desvió su mirada de ellos y reparó en que Kit, que se situaba en el asiento contiguo a Mark, tenía el semblante especialmente apagado y pensativo.

-¿Qué te pasa Kit?- le animó Emma.

Él, sorprendido, levantó los ojos hacia ella para después volverlos a bajar.

-Hoy es el mercado de sombras y si estuviera mi padre... -se apagó su voz en un susurro.

Sintió una punzada de lástima debido a que era una rutina que él seguía con su fallecido padre, y que seguramente echaba de menos en esos momentos. Recordó al Kit de hacía poco más de un mes tras el mostrador de Jonhy Rook, mostrándose jovial y alegre después de haber estado paseando por el mercado.

-¿Quieres que vayamos y damos juntos una vuelta? –le propuso Emma.

-Sería genial ir, -Kit le miró con una amplia sonrisa- así vería a algunos amigos que tengo por allí.

-¿Puedo acompañaros?- Oyó la voz de Erika dirigiéndose a ellos. Emma la miró con una mirada fulminante viendo la incomodidad en el rostro de ella. -Es decir,-continuó- en el mercado de sombras hay hadas ¿no? Quizás sepan algo del asesinato del brujo.

Emma fue consciente que todos habían interrumpido sus conversaciones para escuchar la idea de Erika.

-¿Cómo no se nos ha pasado por la cabeza?- Preguntó Julian estupefacto mientras le sonreía a Erika.

-Diana no estará contenta de saber que Emma ha vuelto a ir por allí. –informó Tiberius que seguía con la vista puesta en su lectura.

-¿Sueles ir mucho?- le preguntó Erika a Emma.

-Hoy no voy allí por gusto. –vaciló Emma dirigiéndose únicamente a Ty, ignorando por completo que era Erika la que le estaba hablando.

-Decidido, vamos entonces.- Dijo Diego poniéndose en pie.

Mark antes de seguir su ejemplo y levantarse hizo una mueca de disgusto por saber que por fin hacían algo interesante en los últimos días y que Diego los iba a acompañar.

-Entonces... ¿Nos preparamos y nos vemos en la puerta en 15 minutos?- preguntó Mark en un tono serio.

Julian y Diego asintieron al unísono mientras que el resto se limitó a levantarse de su asiento para disponerse a tomar camino. Iban a salir por la puerta del salón cuando Tiberius dejó su libro.

-¿Podemos ir Livvy y yo con vosotros? –preguntó.

-Es verdad, -dijo Cristina mirando al grupo - alguien tiene que cuidar al resto de los niños. Me quedo yo.

Diego se quedó mirándola fijamente viendo como aparecía una línea de preocupación en la frente de ella.

-Me quedo contigo. –anunció, viendo la oportunidad de poder quedarse a solas con Cristina después de haber estado esquivándose ambos durante los cuatro últimos días marcando las distancias.

-Vale, pues cogemos sólo un coche- dijo Jules encogiéndose de hombros mientras se dirigía hacia la puerta.

Lord of ShadowsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora