"Se habrán dicho muchas cosas, se habrán escrito muchos libros, pero mientras tu corazón no lo sienta, nada sabrás del amor verdadero".
: : C A P Í T U L O D I E C I O C H O | La respuesta debe ser amor
Actualmente. Entrada trasera de Moonshine, callejón.
(Kellin)
- ¿Qué quieres, Vic? - Mis ojos volvieron a la dirección por donde Miles había huido, una mancha oscura interrumpiendo la decente limpieza del callejón. Una mancha de su sangre.
Exacto, el hombre que se hacía llamar mi mejor amigo lo había dejado ir.
Aún mi mente no lograba procesar una razón válida que podría apoyar sus acciones, tal vez Vic había comenzado a meterse drogas en el cuerpo.
- Vi tu nota - contestó Vic con tono preocupado, sacando mi alocada mente de suposiciones imposibles. Vic era demasiado buena gente para estar involucrado con drogas alucinógenas.
- No era para ti - refunfuñé arrugando mi frente -. Beau quedó de pasar a recoger el dinero por arreglar mi moto si es que no lograba encontrarme. No tenías que venir aquí - al ver que Vic no comprendía mi impaciencia, pasé las manos por mi cabello conteniendo mi frustración. Mis dedos se enredaron en las hebras suaves, relajando un poco mi desilusión -. Por Dios, Vic. Ese era Miles... Su ex. ¿Por qué lo dejaste ir?
Vic levantó una ceja.
- ¿Crees que no quiero romper su rostro también? Pero escuché que habían llamado a la policía. Seguramente los amigos de Miles lo hicieron.
- Cobarde - espeté furioso, apretando mis puños. Siempre involucraban a la policía cuando ven que están perdiendo -. Bueno, que me arresten entonces. No sería la primera vez.
- Kellin, no debiste salir hoy - susurró el moreno, sus ojos mirando por encima de mi hombro -. No estuvo bien.
- Me alegro de haber salido. Conocí una ese estúpido ex novio de Megan y le enseñé una lección que no olvidará en un buen tiempo.
- Sobre eso estoy hablando, Kellin - su mirada se deslizó a mí -. Esta no es tu pelea, no deberías haberlo hecho.
- Se lo merecía. ¿Acaso sabes cómo la llamó? Zorra. ¿De qué diablos me estaba hablando? A Megan ni siquiera le habían dado un maldito buen beso antes de mí.
Vic alzó ambas cejas ahora, pero fingí no lo percibirlo. El moreno podía sacar grandes deducciones cuando se lo proponía y eso no beneficiaba a nadie hoy. Mucho menos a mi mal genio.
- Encima de todo eso me propuso ser amigos ¿puedes creerlo? Él me estaba invitando a partir su cuerpo en pedazos. ¡Me lo restregaba en el rostro!
Vic relajó su cuerpo y movió un hombro con aire cansado.
- Miles es masoquista y todos lo sabemos. Pero al final no ganaste nada, sólo salvaste la impresión que Miles, que ya acordamos que es un imbécil, tenía de Megan.
- ¡Y lo volvería a hacer! - enfaticé con más ímpetu del que debía.
- Es decir que sientes más cosas por Meg de las que admites, la quieres - concluyó mirando mis ojos fijamente. Su boca se curvó en una sonrisa socarrona.
- No - me apresuré a exclamar de forma instantánea. Esto es de locos. ¿Cómo Vic podía leerme tan bien de un segundo a otro? ¿Yo soy así de obvio? Por el amor de Dios, ¿y si Megan ya se había dado cuenta también? No, imposible. Yo recién ahora tomé consciencia de mis sentimientos por ella. Era prácticamente ilógico que Vic o Megan lo supiesen.
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If you can't hang ; kellin quinn [iych #1]
Teen FictionSerie If you can't hang: 1. ¡Aviso! Esta historia puede provocar su risa histérica, un llanto melodramático y un par de sentimientos asesinos hacia los protagonistas. Un poco de paranoia y mucha, pero mucha cursilería precoz. Todo...