"El amor no es lo que ves en las películas. No es el éxtasis, no es lo que ves en ese escenario. ¿No sabes lo que quiero decir? Te estoy diciendo en este momento la verdad: el amor es sacrificio."
: : C A P Í T U L O S E S E N T A Y D O S | Porque eres tú
(Megan)
Una cosa estaba completamente clara en mi mente, mi suerte era del asco. Quiero decir, había muchas cosas que podrían salir mal en una noche fría como está a las 9:38, pero no tan malas como lo que me han pasado.
Por ejemplo, que mientras Kellin estaba sirviéndose un trozo de pastel en la cocina luego de tomar una gran y larga ducha para sacarse la embriaguez se cortara la electricidad de un momento a otro causando un gran estruendo. Sip, se había rebanado el dedo y había gritado como una niña (con gritos tan femeninos como de niña).
Eso, seguido a que yo comenzara a llorar como un bebé cobarde y que Kellin se comportase como un cerdo manchando todo a su paso con la sangre emanando de su maldito dedo. Había sucedido.
Y yo fui la que tuvo que vendar su dedo.
Y por último, luego de tomarse una aspirina estaba notablemente lucido y él había pronunciado las palabras: "Se me ocurrió una idea brillante". (Internamente sabía que con sólo escuchar salir esas palabras de su boca debería haber desconfiado).
Kellin, tomó algunas de las botellas de cerveza ya desocupadas gracias a su interminable estómago y las usó para sostener las velas, iluminando la habitación que se encontraba a oscuras.
La única cosa que faltaba era la tabla de brujería en medio del cuarto para hacer el culto pagano.
Kellin regresó a la sala de estar con dos botellas de cerveza fría en una mano, hábilmente agarradas entre sus dedos y un paquete de papas en la otra que estaba herida. Me ofreció una botella y dijo:
— Entonces... ¿Qué hacemos ahora? – tomando la cerveza que él me ofrecía, me encogí lentamente de hombros.
— ¿Y si sacamos una pregunta cada uno para hacerle al otro, con un numero determinado, como... siete preguntas, por ejemplo? —propuse mientras él se acomodaba a mi lado en el sofá. Sus hombros se rozaban levemente con los míos y una de sus rodillas cosquilleaba en mis muslos. Gracias a la sala oscura en la que nos encontrábamos podía sentir tan nítidamente la cómoda fuente de calor que era Kellin.
Pensó en esto por un tiempo. Casi podía ver los engranajes de su cerebro trabajando para llegar a una solución razonable entre si aceptar esto o no.
— ¿Qué pasa si no quiero responder alguna pregunta? —preguntó.
Oye, no había pensado en eso.
— ¿Qué tal que si no queremos responder alguna pregunta ocuparíamos un "paso" y la dejamos a la otra? Tal vez dos preguntas, podemos optar a no responder a dos preguntas.
Mirándome mientras consideraba la idea, asintió con la cabeza.
—Está bien, eso suena... aceptable. Aunque aun creo que el striptease sería un juego mucho más intere...
—Genial —lo interrumpí —. Pero dejaré en claro que no responderé a ninguna pregunta con respecto a Miles y Elissa —advertí.
—Por mí está bien —dijo tomando un sorbo de su cerveza —. Mientras tú no me hagas preguntas sobre por qué no me recuerdas de Oregón estamos todos bien.
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If you can't hang ; kellin quinn [iych #1]
Teen FictionSerie If you can't hang: 1. ¡Aviso! Esta historia puede provocar su risa histérica, un llanto melodramático y un par de sentimientos asesinos hacia los protagonistas. Un poco de paranoia y mucha, pero mucha cursilería precoz. Todo...