"Los espacios entre nosotros, mantienen todos nuestros secretos dejándonos sin palabras, y no sé por qué"
: : C A P Í T U L O V E I N T I C I N C O | El significado de amar
Campus, College Diamond royal.
(Megan)
- ¡Bájame! Quiero volver a tener mis pies en suelo, maldito y salvaje hijo de... tu mamá - grité con mi voz que estaba ronca forzar a mis cuerdas vocales hacer un esfuerzo -. Esto me lo pagarás, lo juro – siseé con el cuerpo en tensión -. Tonto.
Bien, Megan, un punto por decir el insulto más ñoño de la historia.
- Cállate - gruñó sacudiéndome en su hombro me agarré de su cintura al sentir el vértigo subir por mi columna vertebral al pensar en caer al suelo de forma tan abrupta.
- Kellin, por favor. Puedo caminar por mí misma.
- Entonces ¿podrías decirme que clase de idea fue esa de ensuciar mi ropa? Ese jersey era mi favorito y ahora tendré que ir a casa a cambiarme - dijo sosteniéndome más fuerte en su hombro, su brazo entrelazado en mi cintura como una irrompible barra de acero.
Mi corazón dio un vuelco, y me mordí el labio, nerviosa.
- ¿Me llevarás a tu casa? - pregunté incrédula.
- ¿Tú qué crees? - Lo miré por sobre mi hombro y me di cuenta que mi trasero quedaba justo a la altura su cara. Me removí para quedar en mejor posición, él soltó una carcajada al ver mi dilema y aflojó solo un poco su agarre.
- Responde, idiota.
- Por supuesto que sí, ya dejé claro que estoy harto de tus pataletas y serás mi sirvienta, es mi venganza, y tendrás que bañarme, como mínimo. Mi cabello esta hecho un lío por tu culpa - dijo mientras me llevaba hasta casi el portón principal del colegio.
- ¡No seré tu sirvienta! Eres un maniático loco. Tampoco iré a ninguna parte contigo.
- Sí, Blair, lo harás.
Pateé su pecho y con mis puños golpeé su espalda mientras su hombro se clavaba en mis costillas. Está bien, una cosa es lanzar una gaseosa... con muchas burbujas, hielo y muy pegajosa en la cabeza de una persona, pero otra es obligar a alguien a ser tu sirviente sólo por un enfermizo sentimiento de venganza. Intenté clavar mis uñas en su espalda para dejar marcas y así lograr que él me dejase nuevamente en el suelo solo para descubrir que alguien se me había adelantado, unas protuberancias con forma de medias lunas se desgarraban hacia abajo casi cuatro centímetros... por toda la parte superior de su espalda. ¿Qué demo...?
"¿Sabes lo malditamente sexy que es el sexo agresivo?" ¿Eso no lo había dicho Kellin alguna vez o sólo es mi cabeza perdiendo lentamente su cordura? Parpadeé mientras la sangre escapaba de mis mejillas. Oh, cielos... Él había... con una chica... Agresiva...
- ¡Cerdo asqueroso! - exclamé golpeando con mi puño una de los hematomas inflamados. Él soltó un gruñido de dolor seguido de una muy sabia maldición.
- Aush... Megan. N-no, no golpees ahí - aulló igual que animal herido mientras los dedos de su mano libre acariciaban suavemente las lesiones de su espalda -. Estás loca.
- ¡Quita tus manos de mí! Soy una tonta al creer que ya no eras un mujeriego cuando en realidad eres un... un... ¡Prostituto! - Kellin aflojó el firme ajuste que su brazo tenía en mi cintura, presionándome contra su hombro y lentamente, me dejó otra vez en el suelo -. Una chica hizo esto, no lo puedes negar. Dios, tu no vas a cambiar... nunca.
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If you can't hang ; kellin quinn [iych #1]
Novela JuvenilSerie If you can't hang: 1. ¡Aviso! Esta historia puede provocar su risa histérica, un llanto melodramático y un par de sentimientos asesinos hacia los protagonistas. Un poco de paranoia y mucha, pero mucha cursilería precoz. Todo...