If you can't hang ; kellin quinn [iych #1]

XXVI (4/8)

"Guardamos este amor en una fotografía, construimos estos recuerdos para nosotros mismos, en donde nuestros ojos nunca se cierran, los corazones nunca se rompieron, y los momentos quedan quietos, congelados para siempre."

: : C A P Í T U L O V E I N T I S É I S | El ánimo se fue de paseo

Mansión Menser, California. Pocos días antes del paseo.

(Megan)

Mi garganta se apretó ante la tentación de rogar a la chica frente a mí una tonelada de helado de chocolate con Krispis de colores. Montones y montones de helado mientras las ganas de golpear algo superaban los intentos de mis ojos por derramar lágrimas cobardes. La chica frente a mí raspó un poco más su uña mientras sus ojos se entrecerraban para detectar algún extracto de basura que quedara en ellas.

Solté un gemido silencioso.

Hoy nada levantaría mi ánimo, es que solo recordar la conversación que había tenido con Kellin y el descaro con el que había pronunciado las palabras: "Te amo" hacían que mi apetito se fuese de paseo por el bosque perdido. Demonios, eso había golpeado y desfigurado mi corazón tanto que dolía, dolía hasta ahora. Lo que más me molestaba es la ligereza con la que sus labios formaron esas palabras.

Y es porque he escuchado eso antes, palabras fáciles que no tienen un significado real detrás de ellas. Miles era un experto en decir cosas que en realidad no sentía y he aprendido de mis errores.

Golpeé mi almohada con furia haciendo que la chica frente a mí o mejor conocida como Val alzara su mirada e hiciese una mueca sin entender nada. En las últimas tres horas desde que la llamé para hacerme compañía no habíamos entablado más que un par de frases monótonas y luego de un poco de aburrido silencio ella comenzó a limar sus uñas con el mayor interés del mundo.

El estereo comenzó a tocar 'Use somebody' de King of leon y golpeé con más fuerza mi almohada. ¿Esto era un tipo de venganza de Dios? ¿Venganza por mis malas acciones contra los niños que golpeaba cuando pequeña? Ahora que lo pienso yo no era exactamente una chica cariñosa, entonces... ¿él era algún tipo de Karma?

- Apaga eso - gemí, mi voz ahogada por el relleno de la almohada.

- ¿Qué ocurre, Megan? Esta canción es genial - dijo Val con voz confundida.

- ¿Has escuchado lo que esa canción canta? Quiero decir, ¿quién está orgulloso de utilizar a alguien? - la corregí.

- De acuerdo, pondré otra. - Cambio la canción y un segundo después escuché "Aún te amo, cariño. No llores esta noche, No llores esta noche, Hay un cielo arriba de ti, cariño. Y no llores esta noche."

- No, Don't cry, no - gemí hundiendo mi cara en el colchón con sábana rosa. Es complicado explicar por qué mi cama tenía una sábana color rosa pero la tenía. Jess insistía en que debía ser un poco mas femenina, aún si era mientras dormía.

- Oye, si desprecias a mis Guns es porque tienes un problema mental - dijo Val -. Pondré otra y si no te gusta no debiste haberme invitado a tu casa, de hecho, no sé por qué carajo lo hiciste.

"No soy el hombre que quieres, nena

No soy el hombre que necesitas

Dices que buscas a alguien

Nunca débil, siempre fuerte