XLIX

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"Desearía poder llevarte hasta las estrellas, nunca te dejaría caer ni rompería tu corazón y si quieres llorar y desmoronarte, estaría allí para sostenerte"

: : C A P Í T U L O  C U A R E N T A  Y  N U E V E | Un Quinn enojado es de temer

Gimnasio College Diamond Royal, mediodía.

(Megan)

- Espéreme...solo un...segundo - dije mientras me llevaba la mano al pecho, y me retorcía en las gradas del gimnasio. La maestra me miro con una ceja alzada. Era mi mejor actuación de una enferma y necesitada de descanso, no quería seguir jugando. Ya habían pasado tres horas seguidas sin detenernos ¿Como querían que no inventara algo para zafarme?

- Ok, ve a tomar agua.

Sonreí feliz, me levante de las gradas y me fui hasta las piletas. Saltando de alegría.

- ¡¿No que te sentías mal?! - grito una chica del taller, resentida. No le preste atención, tres horas seguidas solo de Voleibol era mucho hasta para mi.

Llegue a las piletas, justo al lado de la cancha de basquetball. Abrí la llave y me incline a tomar un chorrito de agua.

- Pero miren que buen cuerpo.

Me voltee al instante al escuchar eso de una voz masculina, no era Kellin. Mi cuerpo se tenso, a él se lo habría aguantado, porque eran sus típicos comentarios, pero que otro hombre me los dijera... ¿Quien diablos lo dijo? El pelirrojo me sonreía, sosteniéndose en el poste de la cancha, cruzado de brazos y con la mirada fija en mí. Llevaba el traje del equipo de Futbol.

- ¡¿Q-que dijiste?!

- Que tienes el pelo mas brilloso que he visto en mi vida - mintió divertido, mi ceño se frunció - Oye, oye. No te enojes. Era solo una broma.

- Pues no me gustan ese tipo de bromas, y menos de alguien como tu.

- Oye, no tengo un prontuario tan feo como el de Kellin, y aún así te besas con él. No me juzgues por eso - dijo acercándose a mí - Hace tiempo que no te veía, querida Megan. Que bonita estas hoy.

Me sonroje. ¿Se estaba burlando de mi? pues su tono de voz no era burlón, ni el brillo en sus ojos decía que mentía. Matty Mullins era un experto conquistador.

- ¿Como es qué...?

- Ese día en el casino. ¿Lo recuerdas? ¿Ese beso tan apasionado que se dieron? - sonrió - Juro que si hubiéramos hablado solo unos tres minutos más, me hubiera caído rendido y enamorado a tus pies. Pero ahí nos interrumpió él.

Lo mire sorprendida.

- Oye, no te sorprendas tanto. Eres el tipo de chicas que me gustan. Me gustas bastante.

- No quiero saber para que te gustan - soltó una risa - Y no vuelvas a decirme ese tipo de cosas ¿Escuchaste? No querría tener que golpearte.

- Y me encanta tu sentido del humor - se acerco hasta mi, quedando justo frente a mi - También me encanta el color de tus ojos ¿Son color chocolate o ámbar?

Parpadeé rápidamente. Sorprendida por su pregunta.

- Me lo he estado preguntado todos estos días, además también me preguntaba si tu piel era tan lisa como se ve...Vaya - dijo mientras, sorpresivamente pasaba su mano por mi mejilla - Tu piel es mas suave de lo que esperaba - me miro directamente a los ojos, trate de alejarme, pero él lo impidió, sonrío - Oye, no me tengas miedo - el destello de sus ojos me hizo sentir nerviosa ¿Que me pasaba? Oh, diablos, tenia que irme luego de aquí. ÉL estaba haciendo estragos en los latidos de mi corazón. Me estaba pasando películas con el peor enemigo de Kellin.

If you can't hang ; kellin quinn [iych #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora