Capítulo N°53

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Los días que pasé con Donghae mientras se recuperaba, fueron simplemente hermosos. Nos despertábamos temprano para desayunar en la cama y luego dormíamos una siesta, los chicos venían a almorzar y pasábamos un buen momento juntos, luego se iban y con Donghae nos quedábamos hasta tarde platicando acerca de nuestro bebé y de que pronto tendríamos que ir a comprar todas sus cosas, ya que antes no pudimos porque Donghae estaba encerrado en su oficina y luego fue su accidente.

Una sonrisa se asomó en mi rostro al recordar cómo conseguía que hiciéramos el amor cambiando de posiciones para que no lastimara su pierna y de paso no ser tan brusco conmigo y el bebé.

Hoy por fin le quitaron los puntos de sutura y ahora mismo nos dirigimos en su auto a la casa de Elizabeth, puesto que era el cumpleaños de mi pequeña hermana, Katherine.

Miré a mi lado al hermoso hombre que tenía junto a mí, su vista estaba clavada en el camino y manejaba con cuidado, una sonrisa se asomó en mis labios, él lo notó y mirándome por una fracción de segundos, sonrió.

-¿Qué pasa?

-Nada, solo pensaba en lo afortunada que soy de tenerte a mi lado, en lo locamente enamorada que estoy de ti –Suspiré y noté un pequeño sonrojo en sus mejillas.

-Eso debería decírtelo yo –Tomó la palanca para hacer un cambio y luego deslizó su mano a la mía para entrelazar nuestros dedos y llevarla a su boca, dando un húmedo beso-Te amo tanto que creo que con decirlo no basta –Me sonrió giñándome un ojo-Por cierto, te ves hermosa en ese vestido.

Sonriendo miré hacia mi vestido y recordé el día en que fuimos con Heechul, Aba y Kate a comprar ropa, a Donghae no le había gustado mucho la idea ya que quería ser él mismo el que me comprara ropa, pero luego de convencerlo de que cuando fuéramos a comprar las cosas para el bebé, me compraría todo lo que quisiera, me dejó marchar para quedarse con Eunhyuk jugando una partida en el play.

-Heemin me lo regaló–Comenté tocando la suave tela- Recuerdo que me hizo probarme una gran cantidad de ropa, especialmente overoles ya que según él, con esa prenda me vería más tierna-Rodee los ojos- Hasta que vio este vestido y le gustó.

-Es lindo, tú eres hermosa y el vestido te hace lucir aún más hermosa –Sonrió recorriendo mi cuerpo con la mirada para luego volver al camino- Aunque prefiero verte sin el.

-Donghae –Regañé riendo y sonrió.

Llegamos a la casa y vimos varios autos estacionados fuera de ella, incluido el auto de Aba. Nos bajamos y acomodando mi pequeño bolso en mi hombro, tomé de la mano de Donghae para entrar a la casa. Apenas entramos, sentimos los fuertes gritos y risas de los niños que corrían por toda la casa, sonreí y buscando con la mirada, encontré a Katherine jugando con otra niña, soltó una fuerte risa girando su cabeza y fue cuando nos vio, de inmediato se asomó una gran sonrisa en sus labios y corrió hacia nosotros. Donghae se agachó para tomarla en brazos y darle un fuerte abrazo seguido de un beso en su frente.

-Feliz cumpleaños, pequeña princesa –Sonrió y noté las mejillas de Katherine enrojecidas.

-Feliz cumpleaños, hermanita –Me acerqué para abrazarla y besar su mejilla.

-Gracias –Sonrió feliz y notó la bolsa rosada en mis manos, la cuál Donghae me había pasado luego de tomar a mi hermana- ¿Es mi regalo? –Preguntó animada y asentí.

Donghae la dejó en el piso y agachándome un poco, le di la bolsa, de inmediato la tomó y comenzó a abrirla desesperadamente, pero Elizabeth apareció detrás de ella para quitársela antes de que viera su contenido.

-Lo siento, mi amor, pero recuerda que los regamos se abren después- Katherine hizo un puchero pero mi madre la ignoró para rodearme en sus brazos y luego besar la mejilla de Donghae- ¿Cómo estás? Donghae ¿Ya no te duele?

"simplemente tú"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora