Capítulo N°63

159 15 2
                                    

A la mañana siguiente me había levantado muy temprano, me duché y me puse unos shorts negros junto con una blusa blanca y dejando mi cabello suelto, tomé el celular para llamar a Heechul y preguntarle por mi bebé.

-¡Nena! –Gritó animadamente y sonreír al escucharlo.

-Heemin, ¿Cómo estás? ¿Cómo está Aba?

-Yo estoy muy bien, pero no puedo decir lo mismo por Aba –Sentí unos ruidos- Ten, cariño –Fruncí un poco mi ceño.

-¿Qué ha sucedido?-Pregunté preocupada y suspiró.

-Lo mismo que te sucedía a ti los primeros meses –Suspiré aliviada- No ha dejado de vomitar, pero como Donghae dijo, es normal durante los primeros meses.

-Oh, dile que sea fuerte, solo durara por un tiempo –Sentí unos balbuceos y mi sonrisa se ensanchó- ¿Ese es Aarón?

-Así es, estamos esperando a Aba para ir a donde tu madre a comer. Pequeño demonio, ¿quieres hablar con tu madre? Nena, te lo pondré en altavoz.

-Está bien –Sentí unos ruidos y luego una pequeña respiración- ¿Aarón? Mi amor, mi bebé, soy mamá.

-Mamá –Balbuceo y las ganas de estar allí con él me mataban- Mamá, hola.

-Hola mi vida, ¿Cómo estás? Supongo que tu tío te cuida muy bien.

-Por supuesto que sí –Sentí la voz de Heechul y reír.

-¿Papá?-Preguntó mi pequeño y sentí una punzada en mi pecho, miré hacia la cama y Donghae seguía dormido.

-Papá está durmiendo, mi amor, pero apenas despierte le diré que te llame ¿bien? Ahora cuídate mucho y te mando muchos besos, en unos días más nos veremos, te amo mi precioso.

-Está sonriendo como un tonto –Comentó Heechul y negué con mi cabeza- Tranquila, nena, sabes que lo cuido como si fuera mi propio hijo.

-Lo sé y no sabes cuánto te lo agradezco-Sonreí- Bueno, ahora te colgaré para que puedas salir, dale mis saludos a Aba.

-Lo haré, nena, cuídate y pásenlo muy bien.

-Está bien, adiós.

Corté la llamada y sentí una sensación de vacío y angustia al no haberle contado sobre cómo están las cosas con Donghae, pero decidí que era lo mejor, ya hablaríamos para solucionar todo.

Miré por la ventana y el día estaba hermoso, por lo que decidí salir sin antes dejarle una nota a Donghae para que no se asustara si no me encontraba. Baje por el ascensor y al llegar a la entrada del hotel, me encontré con Lían quien venía llegando con una bolsa en sus manos. Me miró y de inmediato sonrió.

-Hola –Saludó y llevando un mechón detrás de mí oreja, sonreí.

-Hola, mm... Lían, lo siento mucho por lo de anoche.

-Oh, no te preocupes, yo también lo siento, Greta coqueteo sin ningún descaro con tu esposo y yo no debí permitir eso, lo siento mucho.

-No digas eso, tú no tienes la culpa.

-Claro que la tengo, ella es mi esposa y debería controlarla un poco más –Suspiró- Supongo que también te dijo sobre el intercambio de parejas.

-Mmm, sí, me comentó sobre eso.

-Realmente lo siento mucho, ella siempre ha sido algo... ¿liberal? –Soltó una pequeña risa.

-No te preocupes, ya ha pasado.

"simplemente tú"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora